Cómo reparar daños en las piezas tratadas con color de Skanholz
Si has comprado algún kit de madera de Skanholz, como los sets de construcción de extensiones naturales, puede que durante el montaje te encuentres con pequeños desperfectos. Por ejemplo, si ves rayones, golpes o bordes sin pintar en las piezas con tratamiento de color, es importante que los arregles para que tu estructura dure más y se vea bien. Aquí te dejo algunos consejos para tratar esos daños de forma efectiva.
¿Qué es el tratamiento de color?
Las piezas de los kits Skanholz vienen con un barniz de alta calidad que protege la madera de varias maneras:
- Evita que aparezcan hongos de manchas azules
- Resiste la radiación ultravioleta
- Reduce el desprendimiento del barniz
- Minimiza la hinchazón y el encogimiento de la madera
- Conserva la belleza natural de la veta
¿Por qué es importante reparar los daños?
Durante el montaje, es fácil que sin querer dañes alguna pieza con tratamiento de color. Arreglar esos desperfectos es clave para mantener la protección que ofrece el barniz y evitar problemas futuros, como la entrada de humedad o la aparición de hongos. Más vale prevenir que lamentar, ¿no?
Pasos para Reparar Daños Durante el Montaje
Si te encuentras con algún daño mientras armas tu mueble, no te preocupes, aquí te dejo una guía sencilla para solucionarlo sin complicaciones:
- Revisa bien el daño
Antes de ponerte manos a la obra, échale un buen vistazo a todas las superficies que ya están tratadas. Busca rayones, golpes o zonas donde la madera esté al descubierto. Fíjate en:
- Rayas o marcas hechas por tornillos o herramientas
- Bordes sin protección que hayan quedado expuestos
- Agujeros de tornillos que parezcan dañados o desgastados
- Prepara todo lo que vas a necesitar
Los kits de Skanholz traen un bote de barniz para estas reparaciones, así que asegúrate de tener a mano:
- El barniz que viene en tu kit
- Papel de lija de grano fino para suavizar las áreas antes de barnizar
- Un paño limpio para quitar el polvo antes de aplicar el barniz
-
Lija con cuidado la zona afectada
Si ves algún daño, pasa suavemente la lija fina por esa área. Esto ayuda a dejar la superficie lisa y lista para que el barniz se adhiera bien. -
Aplica el barniz
Cuando la superficie esté lista:
- Remueve bien el barniz para que quede uniforme
- Aplica una buena capa en las zonas dañadas, poniendo especial atención en los bordes cortados que no estén tratados
- Es recomendable dar al menos dos manos de barniz antes de terminar el montaje para proteger bien la madera
La verdad, a veces estos detalles marcan la diferencia y más vale prevenir que curar. ¡Suerte con el montaje!
Agujeros de tornillos y otras zonas dañadas
Estas áreas merecen un cuidado especial, igual que el resto. Lo ideal es aplicar al menos dos capas de barniz para asegurarte de que quedan bien protegidas.
5. Deja secar
Es fundamental que el barniz se seque por completo antes de continuar con el montaje. Para acelerar este proceso, procura trabajar en un lugar bien ventilado.
6. Capa final
Si quieres, o si el estado de la superficie lo requiere, puedes dar una última capa de barniz una vez que hayas terminado de montar todo. Esto no solo unifica el acabado, sino que también añade una protección extra.
Mantenimiento regular
Cuidar tus productos Skanholz no termina después de reparar. Es buena idea revisar las superficies de madera al menos una vez al año para detectar cualquier daño nuevo.
- Aplica barniz de nuevo según el desgaste o la exposición al ambiente.
- Limpia las superficies con agua para eliminar suciedad o polvo.
Conclusión
Siguiendo estos pasos, podrás tratar eficazmente los daños que surjan durante el montaje de las piezas tratadas con color de Skanholz. Así, tus construcciones de madera se mantendrán fuertes y bonitas por mucho tiempo. Un mantenimiento constante protege tu inversión y deja que la belleza natural de la madera brille siempre.