Problemas Frecuentes y Cómo Solucionarlos en las Planchas de Inducción AEG
Las placas de inducción son famosas por su rapidez y precisión, y las de AEG no se quedan atrás. Pero, como cualquier electrodoméstico, a veces pueden dar algún que otro problema. Si tu placa AEG te está dando guerra, aquí te dejo algunos consejos para identificar y arreglar los fallos más comunes.
1. La placa no enciende
¿Qué puede estar pasando?
- Puede que no esté bien conectada a la corriente o que la instalación no sea la correcta.
- Quizá el fusible se haya quemado.
- O tal vez no seleccionaste el nivel de calor en los primeros 10 segundos después de encenderla.
¿Cómo arreglarlo?
- Revisa que el enchufe esté bien puesto y que la placa reciba electricidad.
- Echa un vistazo al fusible y cámbialo si está estropeado.
- Recuerda que, una vez enciendes la placa, tienes que elegir la temperatura en menos de 10 segundos para que funcione.
2. La placa emite pitidos o sonidos extraños
¿Por qué sucede?
- Puede que estés tocando varios sensores a la vez.
- Algo podría estar bloqueando el panel de control.
- También podría ser un problema con la conexión eléctrica.
¿Qué hacer?
- Procura tocar solo un sensor a la vez.
- Limpia bien el panel para eliminar cualquier cosa que impida su correcto funcionamiento.
- Si la temperatura cambia sola, puede que haya un fallo en el cableado eléctrico.
La verdad, estos problemas son bastante comunes y con un poco de paciencia se solucionan rápido. Más vale prevenir que curar, así que siempre es bueno revisar bien la instalación y el mantenimiento de tu placa AEG.
3. Zona de inducción que no calienta
¿Qué puede estar pasando?
- La olla o sartén no está bien colocada o no es apta para cocinas de inducción.
- El diámetro del recipiente es demasiado pequeño para la zona que has activado.
- Alguna parte de la función FlexiBridge no está cubierta por la olla o sartén.
¿Cómo solucionarlo?
- Asegúrate de que tus utensilios sean compatibles: busca hierro fundido, acero inoxidable o recipientes con base multicapa.
- Verifica que la olla cubra toda la zona que quieres usar.
- Si no es así, mueve la olla o cámbiala por otra que encaje mejor.
4. Activación de la gestión de potencia
¿Por qué ocurre?
- Estás usando varias zonas a la vez con temperaturas muy altas y eso supera el límite de suministro eléctrico.
¿Qué hacer?
- Baja un poco la temperatura en algunas zonas para que la cocina funcione sin problemas y no se active la gestión de potencia.
5. Indicador de calor residual que no funciona
Posibles causas:
- La zona de cocción quizá no estuvo lo suficientemente caliente para que se active el indicador.
Solución:
- Si crees que la zona debería estar caliente, puede que el sensor tenga algún problema. En ese caso, lo mejor es contactar con un servicio técnico.
6. Problemas con el apagado automático
¿Qué puede estar pasando?
- Puede que haya algún derrame sobre el panel de control, lo que provoca fallos en el apagado automático.
Consejo:
- Limpia bien el panel y evita que se derramen líquidos para que todo funcione correctamente.
Cocción y Seguridad en tu Placa de Inducción AEG
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Retiro de utensilios por más de 30 segundos:
- Mantén siempre limpio el panel de control y evita que se derramen líquidos sobre él.
- Cuando empieces a cocinar en una zona, procura que la olla o sartén permanezca ahí para que la placa no se apague automáticamente.
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Ruido constante durante el uso:
- A veces, los diferentes materiales de las ollas y sartenes generan sonidos porque se expanden con el calor de manera distinta.
- También puede que el ventilador esté funcionando para enfriar la placa.
- Estos ruidos son normales y suelen indicar que la inducción está trabajando bien. Pero si escuchas algo raro o preocupante, no dudes en contactar con el servicio técnico.
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Bloqueo del sistema o activación del bloqueo para niños:
- Puede que sin querer hayas bloqueado la placa o activado el sistema de seguridad para niños.
- Para desactivarlo, enciende la placa y sigue las instrucciones del manual para desbloquearla.
Para terminar
Usar una placa de inducción AEG debería ser algo sencillo y agradable. Conocer los problemas más comunes y cómo solucionarlos te ayudará a manejar la mayoría por ti mismo. Si algo no se arregla, lo mejor es llamar al servicio de atención al cliente o a un técnico especializado. Y recuerda siempre: ¡la seguridad es lo primero!
Antes de ponerte manos a la obra con cualquier reparación o ajuste, no olvides seguir al pie de la letra todas las indicaciones de seguridad que vienen en el manual. La verdad, más vale prevenir que lamentar. ¡Y que disfrutes cocinando sin preocupaciones!