Cómo limpiar tu placa de inducción Point de forma segura
Las placas de inducción están ganando terreno porque son súper eficientes y, además, seguras. Si tienes una de la marca Point, es fundamental que sepas cómo limpiarla bien para que te dure mucho tiempo y, claro, para evitar cualquier accidente. Aquí te dejo algunos consejos clave para que mantengas tu placa impecable y segura.
¿Por qué es tan importante limpiar bien?
Limpiar tu placa con regularidad no solo la mantiene bonita, sino que también alarga su vida útil. Pero ojo, si no lo haces bien, puedes rayarla, dañarla o incluso provocar problemas más graves como un cortocircuito o, peor aún, un incendio.
Consejos básicos de seguridad
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Apaga siempre el aparato: Antes de ponerte a limpiar, asegúrate de apagar la placa desde el interruptor de la pared. Esto evita que te lleves una descarga eléctrica y que, sin querer, la enciendas mientras la limpias.
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Cuidado con las zonas calientes: Después de cocinar, algunas partes de la placa siguen calientes. No las toques hasta que estés seguro de que se han enfriado. Para ayudarte, la luz indicadora te muestra qué zonas todavía están calientes.
La verdad, más vale prevenir que curar, y con estos tips tu placa Point te lo agradecerá.
Cómo limpiar tu placa de vidrio sin dañarla
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Elige bien tus herramientas de limpieza: Olvídate de esos estropajos súper abrasivos o productos químicos fuertes que pueden rayar o estropear la superficie de vidrio. Lo mejor es usar una esponja suave o un paño especial para placas de cocina de vidrio.
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Cuidado con los bordes: Al limpiar, presta atención a los bordes de la placa, porque suelen ser afilados y podrías cortarte sin querer.
Limpieza diaria para mantenerla impecable
Después de cada uso, es fundamental darle una pasada para evitar que se acumulen grasa y manchas difíciles.
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Limpia los derrames al instante: Si se te cae algo, ya sea agua o restos de comida, usa un paño limpio y húmedo para quitarlo rápido. Si el derrame es más grande, sigue estos pasos:
- Apaga la placa.
- Absorbe el líquido enseguida para que no se endurezca.
- Cuando esté fría, limpia la zona con un paño húmedo.
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Usa limpiadores específicos para placas: Cuando la superficie aún esté tibia (pero no caliente al punto de quemar), puedes aplicar un producto especial para placas de vidrio. Esto ayuda a eliminar manchas rebeldes sin rayar.
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Sécala bien: Después de limpiar, asegúrate de secar la placa con un paño suave o una toalla de papel. La humedad puede afectar los controles táctiles y causar problemas.
La verdad, con estos cuidados sencillos, tu placa de vidrio te durará mucho más y siempre lucirá como nueva.
Cómo lidiar con manchas difíciles
Si te topas con manchas rebeldes, como las que dejan los derrames de azúcar o el plástico derretido, aquí te dejo unos pasos que te pueden ayudar:
- Apaga la cocina: Lo primero, desconéctala completamente de la corriente.
- Raspa con cuidado: Usa una espátula especial para cocinas de inducción, y mantenla en un ángulo de unos 30 grados. Así podrás quitar esas manchas sin rayar ni dañar la superficie.
- Limpieza inmediata: Después de raspar, pasa un paño húmedo para recoger los restos y evitar que se endurezcan.
Consejos extra para cuidar tu cocina
- Nada de limpiadores a vapor: El vapor puede colarse en las partes eléctricas y causar problemas.
- Evita objetos pesados: No pongas ni dejes caer ollas o sartenes pesados sobre la superficie, porque podrían agrietar el vidrio.
- Elige bien tus utensilios: Usa solo ollas y sartenes con base plana que encajen bien en las zonas de cocción.
Para terminar
Siguiendo estos consejos, mantendrás tu cocina de inducción Point en perfecto estado y, además, cuidarás tu seguridad mientras la limpias.
Recuerda que lo más importante es la seguridad: siempre apaga el electrodoméstico antes de limpiarlo. Si se derrama algo, límpialo al instante para evitar problemas. Usa los productos adecuados para la limpieza, que no dañen la superficie ni los componentes. Un poco de cuidado diario puede hacer maravillas para que tu cocina dure más tiempo y funcione mejor, ¡créeme que vale la pena!