Consejos Prácticos

Mantén el Rendimiento de tu Campana Extractora con Senz

Cómo cuidar tu campana extractora Senz para que siempre funcione genial

La campana extractora es un aparato que no puede faltar en ninguna cocina. Su trabajo es eliminar el humo, los olores y la grasa que se generan al cocinar, mejorando el aire y haciendo que el espacio sea mucho más agradable. Senz ha creado una campana fácil de usar, pero, como cualquier electrodoméstico, necesita un poco de cariño y mantenimiento para rendir al máximo. Aquí te cuento cómo mantenerla en perfecto estado sin complicaciones.

Limpieza frecuente

Superficies de acero inoxidable

  • Cuándo: Cada semana
  • Cómo: Pasa un paño suave humedecido con agua tibia y jabón. Si quieres, también puedes usar un limpiador especial para acero inoxidable.
  • Consejo: Siempre limpia siguiendo la dirección de las vetas del acero para evitar rayones.

Panel de control

  • Cómo: Límpialo con un paño húmedo y jabón, asegurándote de escurrir bien el trapo para que no quede demasiado mojado.
  • Consejo: Evita productos químicos agresivos, ya que pueden dañar la superficie y anular la garantía.

Filtros de malla para grasa
Estos filtros atrapan la grasa y es fundamental limpiarlos con regularidad para que la campana funcione bien.

  • Cómo limpiarlos: Remójalos en agua tibia con un detergente suave durante unos tres minutos. Luego, frota suavemente con un cepillo blando para eliminar la grasa.
  • Déjalos secar al aire libre, pero evita que les dé el sol directo para que no se deterioren.

Con estos cuidados sencillos, tu campana Senz seguirá funcionando como el primer día y tu cocina se mantendrá fresca y libre de malos olores.

Cómo quitar el filtro:

Empuja las pestañas del filtro hacia adelante y tira suavemente para sacarlo. Ten cuidado al manipularlo para que no se rompa.

Filtro de carbón activado

Si usas la campana extractora en modo recirculación, tendrás que cambiar el filtro de carbón activado cada 3 a 6 meses.

Pasos para reemplazarlo:

  • Saca el filtro de grasa.
  • Coloca el filtro de carbón encima del filtro de grasa y fíjalo con el alambre de acero.
  • Vuelve a poner el filtro de grasa en su lugar.

Mantenimiento de las bombillas

Las bombillas suelen fundirse con frecuencia, así que es bueno tener un plan para cambiarlas cuando toque.

Cómo hacerlo:

  • Apaga la corriente y desconecta la campana.
  • Retira el filtro de grasa.
  • Desatornilla el panel de iluminación y desconecta la bombilla vieja.
  • Coloca la bombilla nueva asegurándote de que quede bien conectada.

Consejo importante: Deja que la bombilla se enfríe antes de tocarla y evita manipularla directamente para que dure más.

Consejos para un uso eficiente

  • Altura de instalación: Lo ideal es que la campana esté entre 65 y 75 cm por encima de la superficie de cocción para que funcione mejor.
  • Tipo de ventilación: Decide si quieres ventilar hacia afuera o en recirculación según cómo tengas la cocina.
  • Ajusta los controles de la campana antes de encenderla para que todo vaya sobre ruedas.

Conductos: Lo que debes revisar

Asegúrate de que los conductos no tengan curvas muy pronunciadas, porque eso puede hacer que el aire no circule bien y pierdas eficiencia.

Problemas comunes y cómo solucionarlos

Si tu campana extractora Senz no está funcionando como debería, aquí te dejo algunos consejos rápidos para que puedas arreglarlo sin complicaciones:

Problema Solución
Luces encendidas pero sin flujo de aire Revisa que el interruptor del ventilador esté activado.
Poco poder de succión Verifica que los filtros estén limpios y bien colocados.
Luces apagadas Cambia las bombillas si es necesario.
Flujo de aire bloqueado Inspecciona que no haya obstrucciones en los conductos.

Para terminar

Mantener tu campana Senz en buen estado es clave para que funcione bien y dure más tiempo. Limpia tanto el exterior como las partes internas, revisa los filtros y cambia las bombillas cuando haga falta. Así, no solo mejorarás tu experiencia al cocinar, sino que también mantendrás el aire de tu cocina fresco y limpio. ¡Más vale prevenir que curar!