Cómo Precalentar tu Horno Empotrado AEG
Si acabas de estrenar un horno empotrado de AEG, seguro que estás deseando ponerte manos a la obra y preparar platos deliciosos. Pero antes de lanzarte, hay un paso que a veces se pasa por alto y que es clave para que todo salga perfecto: el precalentamiento.
¿Por qué es tan importante? Pues porque el horno necesita alcanzar la temperatura adecuada antes de que metas la comida. Si no, el resultado puede no ser el esperado, y nadie quiere eso, ¿verdad?
Aquí te dejo una guía sencilla, basada en las indicaciones oficiales de AEG, para que precalientes tu horno sin complicaciones.
Pasos para precalentar tu horno AEG
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Quita todo lo que no sea fijo: Antes de empezar, asegúrate de sacar todos los accesorios y las guías de las bandejas que puedas quitar. Así el calor circula mejor y no hay sorpresas.
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Enciende el horno: Mantén pulsado el botón de encendido/apagado en el panel de control hasta que el horno se active.
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Elige la función de calentamiento: En el menú, selecciona la función que más se adapte a lo que vas a cocinar. Hay varias opciones, desde hornear hasta asar o gratinar.
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Ajusta la temperatura: Pon la temperatura máxima que necesites para la función elegida. Por ejemplo, si vas a hornear un bizcocho, unos 180 °C suelen ser ideales.
Y listo, con estos pasos tu horno estará listo para cocinar como un profesional. La verdad, a veces uno se olvida de esto y luego se pregunta por qué no queda bien la receta. Más vale prevenir que curar, ¿no?
Deja que el horno se caliente bien:
Dale tiempo al horno para que alcance la temperatura que has elegido, esto puede tomar entre 15 y 60 minutos, dependiendo de lo que vayas a cocinar. Si es la primera vez que usas el horno, te recomiendo dejarlo calentar más tiempo, como una hora, para hacer una especie de "quemado inicial" que elimina cualquier residuo que pueda quedar.
Consejos extra:
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Ventilación: No te sorprendas si durante el primer calentamiento notas olores o un poco de humo. Es normal, así que abre bien las ventanas o enciende el extractor para que el aire circule.
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No abras la puerta: Mantén la puerta del horno cerrada mientras se calienta para que no se escape el calor y la temperatura se mantenga estable.
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Elige la función adecuada: Usa la función de calentamiento que mejor se adapte a tu receta. Por ejemplo, si quieres un bizcocho más suave, la opción de "horneado con ventilador y humedad" es ideal.
En resumen:
Siguiendo estos pasos sencillos, tu horno empotrado AEG estará listo para cocinar como un profesional. Recuerda que un buen precalentamiento es clave para que tus platos salgan perfectos. ¡Disfruta cocinando con tu nuevo horno! Y si necesitas más ayuda, en la web de AEG encontrarás consejos útiles y soluciones a problemas comunes.