Cómo colocar bien tu nevera Smeg al instalarla
Si acabas de comprar una nevera Smeg, lo ideal es que la pongas en el lugar correcto para que funcione de maravilla y te dure mucho tiempo. Te dejo unos consejos para que la coloques bien desde el principio.
Elige el sitio adecuado
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Ventilación: Pon la nevera en un lugar seco y con buena circulación de aire. Esto es clave para que el aparato trabaje sin problemas y no se sobrecaliente.
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Distancia de fuentes de calor: No la pongas pegada a la cocina o a estufas. Lo mejor es dejar al menos 3 cm de separación con cocinas eléctricas o de gas, y unos 30 cm si hay radiadores o calentadores cerca. Así evitas que el calor afecte su capacidad de enfriar.
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Espacio libre arriba: Si la vas a instalar debajo de muebles de pared, deja un espacio de al menos 5 cm encima. Esto ayuda a que el aire circule bien y la nevera respire.
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Accesibilidad: Asegúrate de que tienes suficiente espacio para abrir la puerta sin problemas y para sacar los cajones o estantes cuando necesites limpiarlos o reorganizar.
La verdad, a veces uno no le da mucha importancia a dónde pone la nevera, pero más vale prevenir que curar. Siguiendo estos pasos, tu Smeg funcionará mejor y te evitarás dolores de cabeza.
Ten en cuenta la clase de temperatura
Los frigoríficos Smeg están diseñados para funcionar de manera óptima dentro de ciertos rangos de temperatura, que varían según su clase climática:
- SN (Subnormal): de +10 °C a +32 °C
- N (Normal): de +16 °C a +32 °C
- ST (Subtropical): de +18 °C a +38 °C
- T (Tropical): de +18 °C a +43 °C
Lo ideal es colocar tu nevera en un lugar donde la temperatura ambiente se mantenga dentro de estos límites para que rinda al máximo.
Asegura que esté bien nivelada
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Patas ajustables: Tu frigorífico Smeg tiene dos patas regulables en la parte delantera. Úsalas para que quede perfectamente horizontal. Es importante que la nevera se incline un poco hacia atrás, así la puerta cierra sin problemas.
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Revisa la estabilidad: Después de instalarla, comprueba que esté firme. Abre y cierra la puerta para asegurarte de que sella bien. Si notas que no queda bien, ajusta las patas otra vez.
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Chequeo tras unos días: Cuando lleves unos días con la nevera en uso y cargada de comida, conviene revisar que sigue nivelada. A veces, el peso puede hacer que se desajuste un poco.
Evita errores comunes al instalar
- No la pongas pegada a la pared: Deja un espacio suficiente para que el aire circule bien. Si la nevera está demasiado cerca de la pared, puede sobrecalentarse y no funcionar correctamente. Si hace falta, usa separadores para mantener esa distancia.
Consejos para Ubicar y Cuidar tu Refrigerador Smeg
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Evita la luz solar directa: No pongas tu nevera en un lugar donde le dé el sol de lleno o cerca de zonas con mucha humedad, como al lado del lavavajillas o el fregadero. Esto puede hacer que trabaje más y pierda eficiencia.
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Precauciones de seguridad: Asegúrate de que el electrodoméstico esté bien conectado a tierra, siguiendo las normas eléctricas para evitar cualquier problema. No uses la puerta abierta para mover la nevera, porque podrías dañarla o lastimarte.
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Ten mucho cuidado con el cable de alimentación cuando estés colocando la nevera, para que no se dañe ni se pellizque.
Si sigues estos consejos, tu refrigerador Smeg funcionará mejor y durará más tiempo. La verdad, dedicar un poco de tiempo a instalarlo bien desde el principio es clave para que mantenga su rendimiento y tus alimentos se conserven frescos por más tiempo.