Instalación de la Casa de Jardín Palmako: Consejos para Colocar los Refuerzos Antitormenta
Si te has decidido por una casa de jardín Palmako, ¡felicidades! Estás a punto de darle un toque especial a tu espacio exterior. Pero ojo, para que tu casita aguante bien las inclemencias del tiempo, la instalación correcta es fundamental. En este artículo nos vamos a centrar en cómo poner esos refuerzos antitormenta que son clave para que la estructura no se mueva ni un milímetro cuando soplen vientos fuertes.
¿Por qué son tan importantes los refuerzos antitormenta?
Estos refuerzos son como el cinturón de seguridad de tu casa de jardín: le dan estabilidad extra y evitan que se tambalee o se desplace con el viento. Si no se colocan bien, no cumplen su función y la casa puede sufrir daños.
Antes de ponerte manos a la obra
Lo primero es tener a mano todas las herramientas necesarias y asegurarte de que tienes todas las piezas listas. No te saltes la lectura del manual de montaje, que a veces parece pesado, pero es la mejor forma de evitar errores que luego te pueden costar tiempo y dinero.
Herramientas que vas a necesitar:
- Un martillo o mazo
- Destornillador
- Taladro para madera
- Guantes de protección
- Cinta métrica
Organiza bien las piezas:
Separa los troncos y demás componentes según los planos de las paredes que vienen en el manual. Procura mantener todo seco y no lo dejes en el suelo, especialmente si está mojado o con barro, porque eso puede estropear la madera.
Más vale prevenir que curar, ¿no crees?
Cimientos y Estructura
Para que tu caseta de jardín quede firme y estable, es fundamental que la base esté bien nivelada y sólida. Lo ideal es que la cimentación quede unos 5 cm por encima del suelo, así se asegura una buena ventilación y se evitan problemas de humedad que pueden arruinar la madera con el tiempo. Algunas opciones que puedes considerar son:
- Cimientos continuos o puntuales
- Losas de hormigón o pavimento
Montaje de las Paredes
Cuando empieces a armar las paredes, pon las tablas con la lengüeta hacia arriba y usa un bloque para golpear suavemente y que encajen bien. Después de colocar la primera hilera, no olvides medir las diagonales para comprobar que todo esté perfectamente cuadrado.
Instalación de los Refuerzos Antitormenta
Dónde colocarlos:
Pon los refuerzos en el interior de las paredes delanteras y traseras. Normalmente, necesitarás dos por cada lado.
Cómo fijarlos:
Haz un taladro previo en las tablas donde irán los refuerzos. Usa los tornillos que vienen con el kit para sujetarlos: uno en la parte superior, en la viga del techo, y otro en el centro de la primera tabla completa de la pared.
Ten en cuenta el movimiento de la madera:
No aprietes los tornillos al máximo todavía. La madera se expande y contrae con el clima, y si aprietas demasiado, podrías dañarla. Deja un pequeño espacio en las uniones para que la madera pueda moverse sin problemas.
Revisión tras la instalación
Una vez que hayas terminado de montar la casita, es importante echar un vistazo para ver si se ha asentado o movido un poco. Dependiendo del clima y del tipo de madera que uses, puede que necesites hacer algunos ajustes menores.
Problemas comunes y cómo solucionarlos
Al poner los refuerzos contra tormentas, es normal que surjan algunos inconvenientes. Aquí te dejo los más frecuentes y cómo resolverlos:
| Problema | Causa | Solución |
|---|
| Huecos entre los troncos de la pared | Componentes adicionales que limitan el movimiento | Quita los tornillos o clavos de puertas y ventanas. Afloja los tornillos del refuerzo.
| Puertas y ventanas que se atascan | El suelo se ha asentado o la humedad ha hinchado la madera | Asegúrate de que la casita esté nivelada y, si hace falta, ajusta las bisagras.
| Refuerzos mal alineados | Instalación incorrecta o apretar demasiado rápido | Ajusta las fijaciones para que queden bien alineadas y deja espacio para que la madera se mueva.
Para terminar
Colocar bien los refuerzos en tu casita Palmako es clave para que se mantenga firme y funcione bien durante mucho tiempo. Tómate tu tiempo, revisa que todo esté en su sitio y no olvides que la madera se expande y contrae con el clima. Si sigues estos consejos, tu casita resistirá el paso del tiempo y las inclemencias, dándote muchos años de disfrute.