Guía para preparar la base de tu caseta de jardín Palmako
Si estás pensando en montar una caseta de jardín hecha con abeto marrón tratado en autoclave de Palmako, lo primero que tienes que tener claro es que la base es clave. Tu caseta, que mide 300×240 cm y tiene un suelo de 6,9 m², va a durar mucho más si la apoyas sobre una base firme y nivelada. Esta guía te ayudará a preparar esa base para que la instalación sea un éxito.
¿Por qué es tan importante una buena base?
Una base estable no solo sostiene la caseta, sino que también es fundamental para que la estructura se mantenga sólida y duradera. Si la base está bien hecha, evitarás problemas como que la caseta se hunda o se mueva, y las puertas y ventanas funcionarán sin problemas, sin atascarse ni desajustarse.
Tipos de bases recomendadas
Aquí tienes algunas opciones que funcionan muy bien para la base de tu caseta:
- Cimientos corridos o puntuales: Puedes usar hormigón o ladrillos para crear un soporte estable y resistente.
- Losas de hormigón: Una losa sólida de hormigón es una base muy robusta y duradera.
- Cama de hormigón armado: Si quieres máxima estabilidad, una base de hormigón reforzado es la mejor opción.
Más vale dedicar tiempo a preparar bien la base que lamentar problemas después. ¡Así tu caseta Palmako te acompañará por muchos años!
Pasos para preparar la base de tu caseta de jardín
Elige bien el lugar:
Evita sitios donde el viento sople fuerte o donde la nieve se acumule mucho. Si vives en una zona así, lo mejor es asegurar bien la caseta al suelo para que no se mueva.
Limpia la zona:
Quita toda la hierba, hojas, piedras o cualquier cosa que esté donde vas a poner la base.
Nivelar el terreno:
Es fundamental que el suelo quede completamente plano y con forma rectangular. Usa un nivel de burbuja para asegurarte de que está bien nivelado.
Altura de la base:
La parte superior de la base debe quedar al menos 5 cm por encima del suelo. Esto ayuda a que el agua no se acumule alrededor y daña la estructura.
Ventilación:
Deja espacios libres debajo de la caseta para que el aire circule bien y evites problemas de humedad.
Distancia entre vigas de la base:
Las vigas que sostienen la base tienen que apoyarse por todos lados y no deben estar separadas más de 50 a 60 cm. Esto es clave para que el peso se distribuya bien y la base no se hunda.
Colocando las vigas de la base
Cuando ya tengas la base lista, toca poner las vigas:
- Asegúrate de que el marco base esté plano y nivelado, porque eso es lo que garantiza estabilidad y durabilidad.
Espaciado
Coloca las vigas de cimentación impregnadas siguiendo las indicaciones del plano, asegurándote de que estén bien distribuidas y niveladas. No dejes que queden torcidas o demasiado juntas, porque eso puede afectar la estabilidad.
Protección contra la humedad
Un truco que siempre recomiendo es poner una barrera antihumedad entre la cimentación y las vigas. Esto ayuda a evitar problemas de humedad que pueden dañar la madera con el tiempo.
Protección contra el viento
Para darle más firmeza a la estructura, piensa en fijar las vigas directamente a la base con escuadras metálicas o anclajes (ojo, estos no vienen incluidos en el kit). Así la casa de jardín resistirá mejor los vientos fuertes.
Revisión final antes de montar
Antes de empezar a armar la casita, repasa estos puntos:
- Estabilidad de la base: Verifica que la cimentación esté firme y no se haya movido mientras la preparabas.
- Ventilación adecuada: Asegúrate de que haya suficiente espacio para que el aire circule por debajo de la casa. Esto es clave para mantener la madera seca y prolongar su vida útil.
Conclusión
Tener una base sólida es fundamental para tu casa de jardín Palmako. Si sigues estos consejos con calma y cuidado, crearás un soporte perfecto que garantizará que tu casita esté estable y dure muchos años. Recuerda, dedicar tiempo a la cimentación es invertir en un montaje sin problemas y en disfrutar tu espacio al aire libre por mucho tiempo.
Si te surge cualquier duda o problema, no dudes en echar un vistazo al manual de montaje que te proporciona Palmako. Y sobre todo, ¡disfruta al máximo de tu nuevo rincón verde en casa!