Guía para Limpiar los Brazos Rociadores en Lavavajillas Siemens
Si tienes un lavavajillas Siemens, seguro que en algún momento te has topado con que los brazos rociadores no funcionan como deberían. En esta guía te voy a explicar paso a paso cómo limpiar esos brazos, especialmente si tienes modelos como el SN45ZW55CS. Mantenerlos limpios no solo mejora el rendimiento del aparato, sino que también te asegura que la vajilla salga realmente limpia.
¿Por qué es tan importante limpiar los brazos rociadores?
Los brazos rociadores son los encargados de dirigir el agua para lavar bien los platos. Cuando se tapan con restos de comida, cal o suciedad, el agua no sale con la fuerza ni la dirección correcta, y eso se traduce en platos que no quedan bien lavados. Por eso, hacer una limpieza regular es clave para que tu lavavajillas funcione a tope.
Cómo limpiar los brazos rociadores: paso a paso
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Apaga y desconecta el lavavajillas: Antes de empezar, asegúrate de que el aparato esté apagado y desenchufado para evitar cualquier accidente eléctrico.
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Saca la cesta inferior: Tira de la cesta de abajo para poder acceder al brazo rociador inferior.
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Quita los brazos rociadores:
- Para el brazo inferior, simplemente tira hacia arriba para sacarlo.
Con estos pasos básicos ya puedes empezar a limpiar bien los brazos y eliminar cualquier obstrucción que impida que el agua fluya correctamente. La verdad, a veces uno no se da cuenta de lo mucho que mejora el lavado con un poco de mantenimiento.
Cómo limpiar y mantener los brazos rociadores del lavavajillas
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Desmontaje: Puede que haya un clip o algún mecanismo de bloqueo que tengas que presionar para soltarlos. En el caso del brazo rociador superior, desenróscalo con cuidado para sacarlo de su lugar.
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Revisión de obstrucciones: Enjuaga los brazos rociadores con agua tibia y revisa los orificios para detectar si están tapados. Si encuentras alguna suciedad, usa un palillo o un cepillo suave para despejarlos. No olvides revisar tanto el brazo superior como el inferior, porque ambos pueden atascarse.
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Remojo si hace falta: Si la suciedad está muy pegada, deja los brazos en remojo unos minutos en una mezcla de agua tibia con vinagre. Esto ayuda a aflojar los restos que estén incrustados.
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Volver a colocar los brazos: Después de limpiarlos, simplemente vuelve a encajar el brazo inferior asegurándote de que quede bien fijo. Enrosca de nuevo el brazo superior.
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Prueba de funcionamiento: Coloca la cesta inferior y enciende el lavavajillas vacío. Elige un ciclo de lavado caliente para comprobar que los brazos rociadores giran y funcionan correctamente.
Consejos para mantener los brazos rociadores limpios
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Revisiones periódicas: Echa un vistazo a los brazos al menos una vez al mes para evitar que se tapen.
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Detergente adecuado: Usa un detergente que no deje residuos que puedan obstruir los orificios.
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Filtro limpio: Mantén el filtro del lavavajillas limpio, ya que también influye en el buen funcionamiento de los brazos rociadores.
Descalcificación
Si vives en una zona donde el agua es dura, hacer una descalcificación periódica del lavavajillas puede ser clave para evitar que se acumule la cal dentro de los brazos rociadores. La verdad, es un paso sencillo que puede marcar la diferencia en el rendimiento de tu electrodoméstico.
Conclusión
Cuidar los brazos rociadores de tu lavavajillas Siemens es una tarea fácil pero súper efectiva para mantenerlo funcionando al máximo. Limpiarlos con regularidad no solo garantiza platos más limpios, sino que también ayuda a que tu lavavajillas dure más tiempo. Siguiendo esta guía, tendrás los brazos rociadores en perfecto estado sin complicaciones. Y si después de limpiar notas que algo no va bien, no dudes en contactar con el servicio técnico de Siemens para que te echen una mano.