Consejos Prácticos

Controla la Humedad en tu Cocina con Campanas Smeg

Cómo controlar la humedad en tu cocina con una campana Smeg

Si alguna vez te has preguntado cómo evitar que la humedad se apodere de tu cocina mientras cocinas, usar una campana extractora, como las que fabrica Smeg, puede ser una solución genial. No solo ayudan a eliminar olores y humo, sino que también son clave para mantener a raya la humedad en el ambiente. Vamos a ver cómo sacarle el máximo provecho a tu campana Smeg para que la humedad no sea un problema.

¿Por qué es importante controlar la humedad en la cocina?

Cuando cocinamos, sobre todo al hervir, cocinar al vapor o freír, la humedad en el aire puede subir bastante. Y la verdad, eso puede ser incómodo y hasta peligroso, porque favorece la aparición de moho y hongos. Por eso, ventilar bien la cocina es fundamental para mantener un ambiente saludable y agradable.

Elige el modo adecuado

Las campanas Smeg tienen dos modos de funcionamiento:

  • Modo extracción: Este es el más efectivo para controlar la humedad. Lo que hace es expulsar el aire cargado de vapor, olores y humo hacia el exterior a través de un conducto. Para que funcione bien, necesitas conectar la campana a un ducto externo con un diámetro mínimo de 120 mm y asegurarte de que el aire pueda circular sin obstáculos.

  • Modo recirculación: (Aunque no se menciona en el texto original, es bueno saber que este modo filtra el aire y lo devuelve a la cocina, pero no elimina la humedad tan eficazmente como la extracción.)

Así que, si quieres evitar que la humedad se acumule y que tu cocina se sienta más fresca y limpia, usar la campana en modo extracción es la mejor opción. Más vale prevenir que curar, ¿no crees?

Modo de Filtro: Cómo Funciona y Consejos para tu Campana Smeg

Si no puedes instalar un conducto de salida al exterior, la campana funciona filtrando el aire y devolviéndolo a la cocina. Es una solución práctica, aunque no tan eficaz para controlar la humedad, porque el vapor no se elimina realmente del ambiente. Por eso, es fundamental que uses filtros de carbón activo y los cambies cada seis meses para evitar que los olores se queden atrapados.

Cómo Usar tu Campana Smeg para Controlar la Humedad

  • Antes de cocinar: Enciende la campana unos minutos antes de empezar. Así preparas el espacio para que atrape bien la humedad y los olores que se generen.

  • Mientras cocinas: Déjala funcionando durante todo el proceso. Esto es clave para capturar el vapor y la humedad que se producen.

  • Después de cocinar: No la apagues de inmediato. Mantén la campana encendida unos 15 minutos más para que siga eliminando la humedad y los olores que quedan en el aire.

Ajustes de Control

Las campanas Smeg tienen varias opciones para que puedas adaptar su funcionamiento y sacarles el máximo provecho en el control de la humedad:

  • Velocidades: Usa la velocidad alta cuando hagas platos que generen mucho vapor, como hervir o freír. Así la campana trabaja mejor y mantiene el ambiente más fresco y seco.

Función de Velocidad Intensiva Temporizada

Cuando la humedad en la cocina se dispara, por ejemplo al cocinar platos que generan mucho vapor, esta función es tu mejor aliada. Activa la velocidad máxima durante un tiempo limitado para absorber todo ese exceso de humedad y luego vuelve sola a un nivel más bajo para no desperdiciar energía. Solo tienes que girar la perilla para ponerla en marcha.

Consejos para Usar tu Campana Smeg con Seguridad

  • Mantén siempre una distancia segura de al menos 65 cm entre la placa de cocción y la campana. Esto es fundamental para evitar cualquier riesgo de incendio.
  • No olvides limpiar los filtros con regularidad. Un filtro lleno de grasa no solo reduce la eficacia de la campana, sino que también puede ser un peligro.
  • Lo ideal es lavar los filtros metálicos de grasa cada mes, o con más frecuencia si cocinas mucho y usas la campana a menudo.

Para Terminar

Controlar la humedad mientras cocinas es clave para que tu cocina sea un lugar agradable y saludable. Usa la campana Smeg en modo extracción, enciéndela antes de empezar a cocinar, déjala funcionando durante y un rato después, y no te olvides de su mantenimiento. Así evitarás que la humedad se acumule y disfrutarás de un ambiente más cómodo y limpio. Recuerda, usar la campana regularmente es un gesto sencillo que marca una gran diferencia en tu experiencia culinaria.