Consejos para Ahorrar Energía con tu Refrigerador Smeg
Si tienes un refrigerador Smeg, especialmente uno que incluye congelador, seguro quieres que funcione de manera eficiente y mantenga tus alimentos frescos por más tiempo. Además de ayudarte a reducir la factura de luz, también estarás aportando tu granito de arena para cuidar el planeta. Aquí te dejo algunos trucos prácticos para que tu Smeg consuma menos energía sin perder rendimiento.
- Ajusta la Temperatura Correctamente
Lo ideal es que tu refrigerador esté entre 3°C y 5°C, y el congelador a unos -18°C. La mayoría de los modelos tienen un termostato que facilita estos ajustes. Ojo, ponerlo demasiado frío no solo gasta más electricidad, sino que tampoco mejora la conservación; y si está muy alto, corres el riesgo de que la comida se estropee.
- Evita Abrir la Puerta Más de lo Necesario
Cada vez que abres la puerta, se escapa el aire frío y el aparato tiene que esforzarse más para recuperar la temperatura. Para que esto no pase tanto:
- Planea con anticipación qué vas a sacar antes de abrir.
- Trata de mantener la puerta abierta el menor tiempo posible.
- Y no olvides avisar a todos en casa para que también lo tengan en cuenta.
Limpia el condensador con regularidad
Las bobinas del condensador, que suelen estar en la parte trasera o debajo de tu nevera, necesitan una limpieza de vez en cuando. Si se acumula polvo o suciedad, la eficiencia baja y el frigorífico tiene que esforzarse más, gastando más energía. Lo ideal es pasar un cepillo suave o un paño cada pocos meses para mantenerlas limpias y que tu nevera funcione sin problemas.
Descongela los alimentos dentro del frigorífico
Cuando vayas a descongelar comida, hazlo dentro del compartimento del frigorífico. Así aprovechas el frío que ya tiene el alimento congelado para mantener fresca la nevera, lo que ayuda a ahorrar energía. Es un truco sencillo que a veces se pasa por alto, pero que realmente marca la diferencia.
Guarda los alimentos de forma adecuada
Para que tu nevera Smeg rinda al máximo, presta atención a cómo organizas la comida:
- Envuelve bien: Usa recipientes herméticos o film para que los alimentos se mantengan frescos y no suelten humedad, lo que ayuda a conservar la humedad interna del frigorífico.
- No la llenes en exceso: Deja espacio para que el aire circule bien y la temperatura se mantenga estable.
- Coloca la comida con cabeza: Los productos más delicados, como los lácteos, van mejor en las baldas superiores, mientras que los más resistentes, como los huevos, pueden ir abajo.
Tiempo recomendado para conservar alimentos
- Huevos, quesos y similares: hasta 10 días
- Mantequilla: máximo 7 días
- Carnes frescas: no más de 2 días
- Pescados y mariscos: idealmente 1 día
Con estos consejos, tu nevera funcionará mejor y tus alimentos se conservarán frescos por más tiempo. ¡Más vale prevenir que curar!
Mantén las Gomas de la Puerta Impecables
Revisa y limpia las gomas de la puerta con frecuencia. Cuando están desgastadas o sucias, permiten que el frío se escape y eso hace que el frigorífico consuma más energía. Lo ideal es pasarles un paño con agua tibia y jabón, y echar un vistazo para detectar cualquier hueco por donde pueda salir el aire.
Deja que la Comida Caliente se Enfríe
Antes de meter alimentos calientes en la nevera, déjalos enfriar a temperatura ambiente. Meter comida caliente sube la temperatura interna y hace que el frigorífico trabaje más para enfriarla, lo que se traduce en un gasto extra de energía.
La Ubicación es Clave
Dónde coloques tu frigorífico influye mucho en su rendimiento:
- Evita fuentes de calor: no lo pongas cerca del horno, radiadores o donde le dé el sol directo.
- Asegura buena ventilación: mantén limpias y despejadas las rejillas para que el aire circule bien alrededor del aparato.
Usa la Función de Congelación Rápida con Cabeza
Si tu frigorífico Smeg tiene función de congelación rápida, actívala un día antes de meter grandes cantidades de comida fresca en el congelador. Eso ayuda a que se congele mejor y más rápido. Pero ojo, no te olvides de apagarla después de 24 horas para no desperdiciar energía.
Apágalo Cuando No Lo Uses
Si vas a estar fuera de casa por un tiempo largo y el frigorífico está vacío, lo mejor es desenchufarlo. Eso sí, antes límpialo bien, sécalo y deja la puerta un poco abierta para evitar malos olores y humedad.
Esto ayuda a evitar que aparezca moho y esos olores desagradables que nadie quiere en la cocina. Si empiezas a aplicar estos consejos en tu día a día, tu nevera Smeg funcionará de manera más eficiente y mantendrá tus alimentos frescos y seguros por más tiempo. A veces, con solo hacer unos pequeños cambios, puedes ahorrar bastante energía y mejorar el rendimiento del electrodoméstico sin complicaciones.