Consejos Prácticos

Consejos para Ahorrar Energía con tu Refrigerador Smeg

Consejos para Ahorrar Energía con tu Frigorífico Smeg

El frigorífico Smeg no solo destaca por su diseño elegante y funcionalidad robusta, sino que también te brinda la oportunidad de reducir el consumo eléctrico y cuidar el medio ambiente. Aquí te dejo algunos trucos prácticos para que mantengas tus alimentos frescos y, al mismo tiempo, ahorres energía.

  1. Ajusta la Temperatura Correctamente

Una forma sencilla y efectiva de ahorrar energía es controlar bien la temperatura. Para el compartimento del frigorífico, lo ideal es mantenerla entre 3 °C y 5 °C. En el congelador, lo mejor es fijar la temperatura en −18 °C, que es suficiente para conservar los alimentos sin gastar de más. Así evitas que el aparato se esfuerce demasiado y prolongas la frescura de tus productos.

  1. Evita Abrir la Puerta Más de lo Necesario

Cada vez que abres la puerta del frigorífico o del congelador, se escapa el aire frío y el equipo tiene que trabajar más para recuperar la temperatura. Por eso, planifica con antelación: reúne todos los ingredientes que vas a usar antes de abrir la puerta. Y si necesitas buscar algo, trata de hacerlo rápido para que la puerta no quede abierta mucho tiempo.

Usa la función de enfriamiento rápido con cabeza

Si tienes que enfriar rápido grandes cantidades de comida o bebida recién hechas, la función de enfriamiento rápido es tu aliada. Pero ojo, actívala justo antes de meter los alimentos calientes y apágala cuando ya estén a la temperatura que quieres. Así evitas gastar energía de más.

Limpieza y mantenimiento al día

Mantener tu electrodoméstico limpio no solo es cuestión de higiene, sino que también ayuda a que funcione mejor. Por ejemplo, las bobinas del condensador, que están en la parte trasera, acumulan polvo y eso puede hacer que el aparato trabaje más y enfríe menos. También revisa las gomas de las puertas: si están sucias o dañadas, el frío se escapa y el refrigerador se esfuerza más de la cuenta.

Descongela los alimentos en el refrigerador

En lugar de dejar que los alimentos se descongelen a temperatura ambiente, mejor hazlo dentro del refrigerador. Esto aprovecha el frío que ya tienen los alimentos congelados y evita que la temperatura interna suba de golpe cuando metes comida caliente.

Guarda la comida como se debe

La forma en que guardas los alimentos influye mucho en el rendimiento del refrigerador. Siempre usa recipientes herméticos para tapar la comida y evitar que el aire frío se escape o que los olores se mezclen. Así tu nevera trabaja menos y mantiene todo fresquito por más tiempo.

  • Mantén la humedad dentro y evita que los olores se mezclen o contaminen otros alimentos.
  • No sobrecargues las estanterías: si llenas demasiado el refrigerador, el aire no circula bien y eso afecta la temperatura interna.
  1. Evita meter alimentos calientes
    Antes de guardar comidas o bebidas calientes en la nevera, déjalas enfriar a temperatura ambiente. Esto no solo protege la calidad de tus alimentos, sino que también ayuda a que el electrodoméstico no tenga que esforzarse más de la cuenta para volver a enfriar.

  2. Elige bien dónde colocarlo
    La ubicación de tu refrigerador influye mucho en su rendimiento.

  • Ubicación: Procura que esté lejos de fuentes de calor, como el horno o la luz directa del sol. Así evitarás que trabaje más para mantenerse frío.
  • Ventilación: Asegúrate de que haya suficiente espacio alrededor para que el aire circule bien. Si el flujo de aire se bloquea, el consumo de energía sube.
  1. Mantén el congelador ordenado
    Un congelador bien organizado permite que el aire circule mejor y, por ende, funciona con más eficiencia.
  • Etiqueta y fecha los alimentos: Esto te ayuda a encontrar lo que buscas rápido y evita que tengas la puerta abierta mucho tiempo.
  • Usa recipientes pequeños: Los paquetes más pequeños se congelan antes y facilitan mantener todo en orden.

Apágalo cuando no lo uses

Si vas a salir de casa por un buen rato, lo mejor es apagar el frigorífico. Vacíalo y límpialo bien, y deja la puerta entreabierta para que no se quede ningún olor desagradable.

En resumen

Siguiendo estos consejos para ahorrar energía, tu frigorífico Smeg funcionará de manera más eficiente, manteniendo tus alimentos frescos y ayudándote a reducir la factura de la luz. Prestar atención a la temperatura, mantenerlo ordenado y hacerle un mantenimiento regular no solo cuida el planeta, sino también tu bolsillo.