Cómo Bañar el Pollo en un Asador Weber
Bañar el pollo es clave para que quede jugoso y lleno de sabor. Si tienes un asador Weber, verás que es más sencillo de lo que parece, solo necesitas saber cómo hacerlo bien. Aquí te cuento paso a paso cómo lograrlo.
Preparando el Pollo
Antes de poner el pollo a cocinar, hay que darle una buena preparación. Esto es lo que tienes que hacer:
-
Quita el exceso de grasa: Toma un pollo entero que pese entre 1.58 y 1.81 kg y limpia bien la cavidad para eliminar la grasa sobrante.
-
Haz una marinada: Puedes usar la que más te guste, pero te dejo una idea que funciona genial:
- ½ taza de jugo de manzana
- ⅓ taza de mostaza Dijon
- ⅓ taza de salsa de soya
- ¼ taza de jugo de limón fresco
- 1 cucharadita de hojuelas de chile rojo
Mezcla todo bien y mete el pollo en una bolsa con cierre hermético. Déjalo en la nevera al menos 3 horas, aunque si puedes dejarlo hasta 8, mejor, porque así agarra más sabor.
-
Prepara el asador: Pon jugo de manzana en la taza base que está en el centro del asador Weber.
-
Coloca el pollo: Introduce la tapa de infusión dentro de la cavidad del cuello del pollo. Luego, mete las puntas de las alas detrás del cuello para que se cocine de manera uniforme.
Con estos pasos, tu pollo quedará delicioso y bien jugoso, listo para disfrutar. La verdad, a veces un buen marinado y un poco de cuidado marcan toda la diferencia.
Cómo cocinar el pollo en tu asador Weber
-
Precalienta la parrilla: Pon tu parrilla a fuego indirecto medio, más o menos a 177 °C (350 °F). Esto es clave para que el pollo se cocine parejo y no se queme.
-
Coloca el pollo: Cuando la parrilla esté lista, pon el pollo en el asador. Asegúrate de que quede bien ubicado para que reciba el calor de forma uniforme.
-
Tiempo de cocción: Deja que el pollo se cocine durante unos 45 a 50 minutos. La idea es que los jugos salgan claros y que la temperatura interna alcance los 82 °C (180 °F). Esto garantiza que esté bien cocido y jugoso.
-
Bañar el pollo: Cada media hora, abre con cuidado la parrilla y usa un pincel o una cuchara para recoger los jugos que se acumulan en la base del asador. Luego, vierte esos jugos sobre el pollo para mantenerlo húmedo y lleno de sabor.
Cómo saber si está listo
Después de unos 45 minutos, o cuando creas que ya casi está, es momento de revisar:
- Usa un termómetro para carne: Mételo en la parte más gruesa del pollo. Si marca 82 °C (180 °F), ¡listo! Si no, déjalo un poco más y vuelve a checar cada 5 o 10 minutos.
Deja que repose
Cuando el pollo esté cocido, es súper importante dejarlo reposar un rato:
- Sácalo del fuego: Con guantes o pinzas, pasa el pollo y el asador a una superficie donde puedas dejarlo tranquilo unos minutos. Esto ayuda a que los jugos se redistribuyan y el pollo quede más sabroso y jugoso.
La verdad, seguir estos pasos hace toda la diferencia para que tu pollo quede espectacular, jugoso y con un sabor que te hará repetir.
Deja que repose
Después de sacar el pollo del fuego, es fundamental dejarlo reposar entre 5 y 10 minutos. ¿Por qué? Porque durante ese tiempo los jugos se redistribuyen por toda la carne, haciendo que quede mucho más jugosa y tierna. La verdad, a veces uno quiere cortar y comer de inmediato, pero créeme, la espera vale totalmente la pena.
Cómo limpiar tu asador Weber
Una vez que hayas disfrutado de ese delicioso pollo, no olvides darle un buen cuidado a tu asador Weber para que te dure mucho tiempo:
- Enfriar primero: Antes de empezar a limpiar, asegúrate de que el asador esté completamente frío para evitar accidentes.
- Limpieza a mano: Olvídate del lavavajillas. Lo mejor es usar agua caliente con jabón y luego enjuagar bien con agua caliente limpia.
- Cuidado con la superficie antiadherente: No uses estropajos o materiales abrasivos que puedan rayar y dañar la capa antiadherente.
- Guárdalo bien: Cuando no lo uses, guárdalo en un lugar seguro para evitar golpes o daños.
En resumen
Bañar el pollo en un asador Weber es una técnica fantástica para conseguir una carne tierna y llena de sabor. Si sigues los pasos adecuados, desde la preparación hasta la limpieza, sacarás el máximo provecho a tu asador. ¡Disfruta de ese pollo perfectamente jugoso y feliz parrillada!