Cómo Mover Tu Nevera Smeg Sin Que Sufra Daños
Cambiar de lugar tu nevera Smeg puede parecer complicado, sobre todo si quieres evitar que se estropee durante el traslado. La marca ofrece algunas recomendaciones para que el transporte y la instalación sean seguros. Te cuento cómo hacerlo paso a paso para que tu nevera llegue intacta.
- Prepárate Antes de Moverla
Antes de ponerte manos a la obra, échale un ojo al manual de usuario. Entender bien qué necesita tu electrodoméstico es clave para que todo salga bien.
- Desenchufa la nevera: Siempre desconecta la corriente antes de moverla, no te la juegues.
- Vacía el interior: Saca toda la comida, bebidas y las baldas. Así la nevera pesa menos y evitas que algo se derrame o se dañe por dentro.
- Muévela con Cuidado
Cuando llegue el momento de levantarla y trasladarla, ten en cuenta estas recomendaciones:
- Pide ayuda: No intentes hacerlo solo, mejor que alguien te eche una mano para que no te lesiones y la nevera no se caiga.
- No uses la puerta para levantarla: Jamás uses la puerta abierta como palanca, porque puedes romper las bisagras o dañar la puerta.
La verdad, a veces uno piensa que es fácil, pero con estos consejos evitarás sustos y daños innecesarios.
Cómo mover tu nevera sin complicaciones
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Muévela sobre una superficie plana: Para evitar que se vuelque o se caiga, asegúrate de que la nevera se deslice siempre sobre un suelo nivelado. Si estás en una alfombra, lo mejor es deslizarla con cuidado para no forzarla.
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Cuida la nevera y el suelo:
- Usa materiales protectores: Coloca mantas o almohadillas especiales para muebles debajo de la nevera mientras la mueves. Esto protege tanto el electrodoméstico como el suelo de posibles daños.
- Asegura las piezas sueltas: Si tu nevera tiene estantes ajustables, sácalos y guárdalos aparte. Así evitarás que se muevan o golpeen durante el traslado.
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Protege el sistema de refrigeración:
- Evita inclinarla demasiado: Mantén la nevera lo más vertical posible. Si la inclinas, el refrigerante puede escaparse y dañar el circuito interno.
- No uses objetos punzantes: Durante el movimiento, evita usar herramientas o utensilios que puedan rayar o abollar la superficie, ya que eso podría afectar su funcionamiento.
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Después de moverla:
- Déjala reposar: Una vez que la nevera esté en su nuevo lugar, espera al menos dos horas antes de enchufarla. Esto permite que el refrigerante se asiente correctamente y evita problemas.
La verdad, seguir estos consejos puede ahorrarte muchos dolores de cabeza y mantener tu nevera en perfecto estado durante la mudanza. Más vale prevenir que curar, ¿no crees?
Nivelar el electrodoméstico
Ajusta las patas regulables para que la nevera quede bien nivelada sobre el suelo. Esto es clave para evitar problemas con las juntas de la puerta y para que funcione correctamente.
Ubicación lejos de fuentes de calor
Procura que la nevera esté instalada lejos de hornos, cocinas o la luz directa del sol. El calor excesivo puede hacer que trabaje más y pierda eficiencia.
Revisión final
Después de moverla, haz estas comprobaciones:
- Revisa el sello de la puerta: Asegúrate de que cierre bien para mantener la temperatura interna. Si notas que no sella bien, puede que necesites volver a nivelarla.
- Enciéndela: Una vez en su lugar, conéctala, ajusta la temperatura que prefieras y espera a que se enfríe antes de meter la comida.
Conclusión
Mover tu nevera Smeg sin que sufra daños es totalmente posible si sigues estos consejos sencillos. Prepararte bien, manejarla con cuidado y colocarla en un sitio adecuado son la clave. Con un poco de planificación y ayuda, podrás trasladarla sin problemas y seguir disfrutando de sus beneficios en tu nuevo espacio.