Consejos Prácticos

Cómo solucionar problemas de temperatura en refrigeradores AEG

Cómo solucionar problemas de temperatura en tu frigorífico AEG

Si tu frigorífico AEG no está manteniendo la temperatura adecuada, no te preocupes, no eres el único. A muchos les pasa que la nevera no enfría bien o que el congelador no logra conservar los alimentos como debería. La buena noticia es que, en muchos casos, puedes arreglarlo tú mismo sin llamar a un técnico. Aquí te dejo una guía sencilla con pasos comunes para que tu AEG vuelva a funcionar como debe.

Problemas frecuentes con la temperatura

Estos son algunos de los inconvenientes más habituales que podrías notar:

  • La nevera no enfría: Los alimentos están más calientes de lo normal y no se conservan bien.
  • El congelador no congela: El helado está blando o los alimentos congelados se están descongelando.
  • Exceso de escarcha: Se acumula demasiada escarcha dentro del congelador.
  • Alarma de temperatura: El frigorífico te avisa con señales de que algo no va bien.

Lista rápida para empezar a revisar

Antes de meterte en reparaciones complicadas, prueba estas cosas básicas:

  • Revisa la corriente: Asegúrate de que el frigorífico esté enchufado a un tomacorriente que funcione y que el cable no tenga daños.
  • Chequea las juntas de las puertas: Verifica que las puertas cierren bien y no queden espacios por donde se escape el frío.

A veces, con estos simples pasos, el problema se soluciona y evitas gastos innecesarios. Ya sabes, más vale prevenir que curar.

Revisa los sellos y la circulación de aire

  • Antes que nada, échale un ojo a los sellos de la puerta. Si están sucios o deformados, la puerta no cerrará bien y eso deja que entre aire caliente, lo que hace que la temperatura suba sin que te des cuenta.

  • No llenes el refrigerador hasta el tope. Cuando está demasiado cargado, los conductos de aire se bloquean y el frío no circula como debería. Deja un poco de espacio entre los alimentos para que el aire pueda moverse libremente.

Ajusta la temperatura

  • Asegúrate de que los termostatos estén en la temperatura correcta: unos +4°C para la nevera y -18°C para el congelador son ideales. Si tienes dudas, mejor resetea los controles para empezar de cero.

Dale tiempo para enfriar

  • Si acabas de meter mucha comida caliente, no te preocupes si tarda un poco en enfriar todo. Lo mejor es no abrir la puerta durante varias horas para que el aparato haga su trabajo sin interrupciones.

Pasos avanzados para solucionar problemas

  • Si con lo básico no se arregla, prueba estas opciones:

    • Funciones Frostmatic y Coolmatic: Estas opciones aceleran el enfriamiento y congelación, pero si no las necesitas, apágalas porque pueden alterar la temperatura normal.

    • Compresor caliente: Toca el compresor que está atrás del refrigerador. Si está demasiado caliente, puede ser señal de un problema que requiere atención.

¿Tu nevera está demasiado caliente? Esto podría ser una señal de que algo no va bien. Asegúrate de que el aparato tenga buena ventilación, porque si el aire no circula bien, puede sobrecalentarse y eso no es nada bueno.

Revisa el orificio de desagüe

Echa un vistazo al orificio de desagüe dentro del compartimento de la nevera. Si está tapado, el agua se puede acumular y eso puede afectar el enfriamiento. Lo mejor es limpiar cualquier bloqueo que encuentres para evitar problemas.

Temperatura ambiente

Coloca la nevera en un lugar donde la temperatura ambiente esté entre +10°C y +43°C, que es el rango ideal para que funcione bien. Si hace mucho calor alrededor, la nevera tendrá más dificultad para mantener todo frío.

¿Hay escarcha acumulada?

Si notas que la escarcha en el congelador supera los 5 mm de grosor, es hora de descongelar. La escarcha excesiva bloquea la circulación del aire y eso afecta el rendimiento. Sigue las instrucciones del manual para descongelar correctamente.

Indicadores y alarmas

Si tu nevera AEG tiene una luz o alarma que parpadea, presta atención:

  • Alarma de puerta abierta: Si dejas la puerta abierta más de 5 minutos, sonará una alarma. Solo cierra la puerta para que se apague.
  • Alarma de temperatura: Si el sensor detecta algo raro con la temperatura, la alarma se activará. Revisa que la configuración esté bien y que no haya nada bloqueando el paso del aire.

Cuándo pedir ayuda profesional

Si después de probar todos los pasos que te hemos contado sigues teniendo problemas con la temperatura, quizá sea momento de llamar al Centro de Servicio Autorizado de AEG. Ellos tienen la experiencia para revisar a fondo el compresor, los sensores u otras partes internas que podrían estar fallando y que requieren un toque profesional para arreglar.

En resumen

Siguiendo esta guía paso a paso, deberías poder solucionar los problemas más comunes de temperatura en tu nevera AEG sin complicaciones. Empieza siempre por lo más sencillo y avanza a soluciones más complejas solo si es necesario. Mantener la temperatura adecuada no solo protege tus alimentos, sino que también ayuda a ahorrar energía. Y si ves que el problema persiste, no dudes en buscar ayuda especializada, que más vale prevenir que lamentar.