Cómo rellenar el aceite de un gato hidráulico tipo botella
Si tienes un gato hidráulico de botella, sabes que mantenerlo en buen estado es clave para que funcione bien y sin problemas. Uno de los puntos más importantes es asegurarte de que el nivel de aceite hidráulico esté siempre correcto. Este aceite es el alma del gato, porque permite que trabaje suave y seguro.
En este artículo te voy a contar paso a paso cómo rellenar el aceite de un gato hidráulico, especialmente si es de la marca Facom.
¿Por qué es tan importante el aceite hidráulico?
El aceite hidráulico no es solo un líquido cualquiera; es el que transmite la fuerza dentro del sistema, lubrica las piezas y mantiene todo funcionando como debe. Con el tiempo, el aceite puede perder sus propiedades o ensuciarse, y eso hace que el gato no rinda igual o incluso se pueda dañar.
Por eso, es fundamental revisar y rellenar el aceite con regularidad para evitar sorpresas desagradables.
¿Cuándo deberías revisar el nivel de aceite?
Antes de usar tu gato hidráulico, es buena idea echar un vistazo al nivel de aceite. Algunas señales que indican que necesitas rellenar son:
- El pistón no se extiende completamente.
- El gato funciona lento o de forma irregular.
- Ves que hay fugas de aceite.
Si notas alguno de estos síntomas, no lo dejes pasar y revisa el aceite cuanto antes. Más vale prevenir que curar, ¿no?
Cómo rellenar el aceite hidráulico en tu gato de botella
Cambiar el aceite de tu gato hidráulico es más sencillo de lo que parece, aunque siempre hay que tener cuidado para que todo funcione bien y sin riesgos. Te dejo una guía paso a paso para que no te pierdas:
Lo que vas a necesitar:
- Aceite hidráulico aprobado (usa ISO VG 13, ¡ojo! no uses líquido de frenos)
- Un recipiente limpio para vaciar el aceite viejo, si hace falta
- Un embudo (opcional, pero ayuda mucho)
- Una llave para aflojar el tapón de llenado
Pasos a seguir:
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Prioriza la seguridad: Coloca el gato sobre una superficie firme y nivelada. No te olvides de ponerte guantes y gafas de protección, que nunca está de más.
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Revisa el gato: Echa un vistazo para asegurarte de que no tenga daños visibles ni fugas. Si ves algo raro, mejor no lo uses hasta que lo arregles.
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Coloca el gato correctamente: Ponlo en su base y asegúrate de que el pistón esté completamente retraído. Esto es clave para que el relleno sea efectivo.
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Quita el tapón de llenado: Con la llave, desenrosca con cuidado el tapón que está en la parte superior del gato. Prepárate para recoger cualquier gota que pueda salir.
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Drena el aceite viejo (si es necesario): Si el aceite está sucio o contaminado, vacíalo en un recipiente limpio para desecharlo adecuadamente.
La verdad, con estos pasos no hay pierde y tu gato quedará listo para seguir funcionando sin problemas. ¿Quieres que te ayude a hacer el texto más breve o más detallado?
Cómo mantener tu gato hidráulico en perfecto estado
Rellenar con aceite nuevo:
Para que tu gato funcione como debe, es fundamental rellenarlo con aceite hidráulico fresco. Usa un embudo para verter el aceite hasta que quede justo por debajo del orificio donde va el tapón de llenado. Ojo, no te pases con la cantidad, porque si echas demasiado, el gato puede dejar de funcionar.
Colocar el tapón de llenado:
Después de añadir el aceite, asegúrate de enroscar bien el tapón para que quede bien cerrado y no haya fugas.
Eliminar el aire del sistema:
Gira la válvula de liberación en sentido contrario a las agujas del reloj, aproximadamente media vuelta, para abrirla. Luego, extiende y retrae el gato varias veces; esto ayuda a sacar el aire atrapado que puede hacer que el levantamiento sea débil o inestable.
Revisiones finales:
Una vez que hayas expulsado el aire, vuelve a comprobar el nivel de aceite. Debe seguir estando justo por debajo del orificio del tapón.
Almacenamiento adecuado:
Cuando no uses el gato, quita la manija y guárdalo en posición vertical, en un lugar limpio y seco para evitar daños.
Consejos para el mantenimiento de tu gato hidráulico de botella
- Revisiones periódicas: Antes de cada uso, échale un vistazo al nivel de aceite y haz una inspección rápida para asegurarte de que todo está en orden.
- Manténlo limpio: Después de usarlo, especialmente si estuvo en contacto con tierra, agua o suciedad, límpialo bien para que no se deteriore con el tiempo.
Cómo Guardar y Mantener tu Gato Hidráulico
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Guárdalo bien: Cuando no estés usando el gato, lo mejor es dejarlo siempre apoyado sobre su base y en un lugar seguro, donde no corra riesgos de caerse o dañarse.
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Usa el aceite correcto: No te la juegues con cualquier aceite. Es fundamental que utilices el tipo recomendado para hidráulicos, que es el aceite ISO VG 13. Esto ayuda a proteger las juntas y las válvulas del gato, evitando que se estropeen.
Para Terminar
Cambiar o rellenar el aceite de un gato hidráulico puede parecer una tarea sencilla, pero en realidad es clave para que tu herramienta funcione bien y dure mucho más tiempo. Si sigues estos consejos, tu gato mantendrá su fuerza y rendimiento.
Recuerda siempre respetar las normas de seguridad y manipular el gato con cuidado para evitar accidentes. Y si alguna vez notas fugas importantes o problemas que no sabes cómo resolver, lo mejor es acudir a un técnico especializado o a tu distribuidor Facom para que te echen una mano.