Guía para Desmontar y Limpiar la Puerta de tu Horno
Limpiar el horno puede ser un verdadero lío, sobre todo cuando toca la puerta. Si quieres mantener tu horno impecable sin complicarte la vida, esta guía de Cylinda te explica paso a paso cómo quitar la puerta de forma segura para que puedas limpiarla a fondo.
¿Por qué sacar la puerta del horno?
Quitar la puerta te da acceso a esos rincones difíciles de alcanzar, donde se acumula la suciedad más rebelde. Así, la limpieza es mucho más profunda y tu horno no solo se ve mejor, sino que también funciona mejor y dura más tiempo. Porque, seamos sinceros, un horno limpio es un horno feliz.
Pasos para quitar la puerta del horno
Antes de empezar, asegúrate de que el horno esté apagado y completamente frío. No queremos sorpresas ni quemaduras.
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Desengancha la moldura superior:
Con un destornillador plano, levanta con cuidado la moldura que está en la parte superior de la puerta. Hazlo suavemente por los lados hasta que se suelte y luego retírala con cuidado. -
Levanta la puerta:
Abre la puerta del horno por completo. Busca el dispositivo de seguridad en las bisagras, que está en la parte superior a cada lado. Tira hacia arriba de este seguro para desbloquearlo. -
Quita la puerta:
Con el seguro ya liberado, levanta la puerta con cuidado para sacarla.
Y listo, ya tienes la puerta fuera para limpiarla bien y dejarla como nueva. A veces, dedicarle un poco de tiempo a estos detalles hace toda la diferencia para que tu horno siga funcionando como el primer día.
Cómo desmontar y limpiar la puerta del horno
Quitar la puerta: La puerta debería salir sin problemas de las bisagras, con un poco de cuidado.
Sacar el panel de vidrio (opcional): Si quieres, puedes retirar también el cristal siguiendo las indicaciones del fabricante. Eso sí, asegúrate de revisar bien el manual de tu modelo para no equivocarte.
Limpieza: Ahora que tienes la puerta fuera, es el momento perfecto para darle una buena limpieza tanto al interior de la puerta como a las bisagras. Así evitas que se acumule suciedad y funcione mejor.
Volver a montar: Para colocar la puerta de nuevo, alinea bien las bisagras y ponla en su sitio. No olvides empujar hacia abajo el dispositivo de seguridad para que quede bien fija. Luego, coloca la lama superior empezando por un extremo y empujando el otro hasta que encaje con un clic.
Importante: Nunca intentes poner la lama superior desde los dos lados al mismo tiempo, porque podrías dañarla. Mejor asegúrate de fijar un extremo primero.
Consejos para limpiar la puerta del horno
- Usa productos suaves: Evita limpiadores abrasivos o rasquetas metálicas que puedan rayar el vidrio y hacerlo más frágil. Lo mejor es una mezcla de agua tibia con jabón, que suele funcionar de maravilla.
- Seca bien: Después de limpiar, asegúrate de que la puerta esté completamente seca antes de volver a montarla para evitar humedad acumulada.
- Revisa con frecuencia: De vez en cuando, échale un ojo a las juntas y bisagras para detectar desgaste y asegurarte de que todo sigue funcionando bien.
Seguridad ante todo
No olvides activar el seguro para niños si tu horno cuenta con uno. Esto es clave para evitar que los peques puedan abrir la puerta accidentalmente cuando están cerca. El mecanismo funciona de maravilla siempre y cuando lo pongas bien en marcha.
Para terminar
Con esta guía ya tienes todo lo necesario para quitar y limpiar la puerta de tu horno sin riesgos. Mantenerlo limpio no solo hace que cocinar sea más agradable, sino que también evita esas manchas y suciedad que nadie quiere ver. Además, un espacio limpio en la cocina no solo se ve mejor, sino que también ayuda a preparar alimentos en un ambiente más sano. ¡Disfruta de tus recetas con un horno reluciente!