Cómo Cuidar tus Muebles de Exterior para que Duren Más
Si quieres que tus muebles de exterior te acompañen durante muchos años, protegerlos del clima es fundamental. Por ejemplo, los muebles de pino pintado, como los que fabrica Hillerstorp, pueden sufrir daños si no les das un poco de cariño y atención. Aquí te dejo una guía sencilla para que tus muebles resistan la humedad, la lluvia y el sol sin problemas.
Entendiendo el Daño que Causa el Clima
La madera es un material vivo que absorbe y libera humedad constantemente. Esto puede provocar que aparezcan pequeñas grietas en la superficie, pero no te preocupes demasiado: esas rajaduras superficiales no suelen afectar la resistencia ni la funcionalidad de tus muebles. Con el tiempo, es normal que notes que el color cambia un poco, sobre todo alrededor de los nudos de la madera. La buena noticia es que el sol ayuda a que esas manchas se vayan aclarando.
¿Cómo Afecta el Clima a tus Muebles?
- Humedad y lluvia: El contacto directo con el agua puede ir dañando la madera poco a poco si no la proteges.
- Luz solar: Los rayos UV pueden hacer que la pintura se desgaste y pierda color, especialmente en las partes que están siempre expuestas.
- Temperaturas altas: Cuando hace mucho calor, por encima de 38 ºC, la resina de la madera puede salir a la superficie y dejar una sensación pegajosa.
Así que ya sabes, un poco de cuidado y atención pueden hacer que tus muebles de exterior se mantengan bonitos y funcionales durante mucho más tiempo. ¡Más vale prevenir que curar!
Consejos para Cuidar tus Muebles de Exterior
Para que tus muebles de exterior se mantengan en buen estado y duren mucho tiempo, te dejo algunos trucos que me han funcionado y que seguro te ayudarán:
- Cúbrelos cuando no los uses
Siempre que no estés disfrutando de tus muebles, lo mejor es protegerlos con una funda de buena calidad. Esto los resguarda de la lluvia, la nieve y el sol directo, que son los principales enemigos de cualquier mueble al aire libre.
- Guárdalos bien en invierno
Cuando llegue el frío, sigue estos consejos para que tus muebles no sufran:
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Secos, siempre secos: Antes de guardarlos, asegúrate de que estén completamente secos. La humedad puede provocar moho y dañar la madera o el material.
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Un lugar fresco y ventilado: Lo ideal es almacenarlos en un sitio donde circule el aire y no haga mucho calor, así evitas que se acumule humedad.
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Si los dejas afuera, protégelos bien: Usa una funda que los cubra del agua y la nieve, pero deja un pequeño espacio para que el aire pueda entrar y evitar que se forme condensación.
- Limpieza y mantenimiento regular
No dejes que la suciedad se acumule, porque puede estropear tus muebles con el tiempo:
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Pásales un paño seguido: Limpia las superficies para quitar polvo y humedad.
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Revisa que no tengan daños: Echa un vistazo de vez en cuando para detectar grietas o que la pintura se esté desgastando, así puedes arreglarlo a tiempo.
La verdad, con un poco de cuidado y atención, tus muebles de exterior pueden lucir como nuevos temporada tras temporada. Más vale prevenir que curar, ¿no crees?
4. Retoques y repintado
Con el paso del tiempo, tus muebles van a necesitar un poco de cariño extra, como retoques o una mano de pintura nueva. La frecuencia con la que tendrás que hacerlo depende mucho del clima donde vivas y de cómo los cuides. Por ejemplo, si estás en un lugar con condiciones climáticas duras, puede que tengas que repintar cada pocas temporadas para mantenerlos protegidos.
5. Ten en cuenta el material
Los muebles de madera pintada son especialmente delicados y más propensos a sufrir daños. Por eso, si puedes, lo mejor es usar fundas diseñadas para muebles de exterior o, mejor aún, invertir en muebles hechos con materiales que resistan mejor el sol, la lluvia y el viento.
Conclusión
Si quieres que tus muebles de exterior duren mucho más, lo importante es protegerlos bien. Cubrirlos, darles mantenimiento regularmente y guardarlos en invierno son pasos clave para evitar que la humedad y el sol los estropeen. No olvides revisar de vez en cuando si tienen algún daño y estar listo para darles una mano de pintura o hacer retoques cuando haga falta. Con un poco de cuidado, tus muebles pueden seguir luciendo geniales y funcionando bien temporada tras temporada.