Cómo llenar un calentador de toallas a base de agua con glicol
Si tienes un calentador de toallas de la marca Hafa, es fundamental que lo llenes de la manera correcta, sobre todo si está en un lugar donde hace mucho frío y puede congelarse. Te voy a contar paso a paso cómo hacerlo bien usando glicol.
¿Por qué usar glicol?
Cuando las temperaturas bajan mucho, es súper importante mezclar agua con glicol para llenar el calentador. ¿La razón? Evitar que el agua se congele y dañe el equipo. El glicol funciona como un anticongelante, manteniendo el líquido en movimiento aunque el termómetro marque bajo cero.
Materiales que vas a necesitar
- Glicol (el mismo que se usa en los coches)
- Agua pura
- Un embudo (no es obligatorio, pero ayuda mucho)
- Un recipiente para mezclar
Proporciones para la mezcla
La cantidad de glicol que debes usar depende de lo frío que pueda llegar a hacer donde está el calentador. Aquí te dejo una tabla para que elijas la mezcla adecuada:
| Temperatura (°C) | % de Glicol |
|---|---|
| -4 | 15 |
| -8 | 20 |
| -15 | 30 |
| -23 | 40 |
| -35 | 50 |
Escoge el porcentaje que mejor se adapte al clima de tu zona.
Pasos para llenar el calentador
Antes de empezar, asegúrate de que el calentador esté apagado y frío para evitar accidentes o daños. Luego, mezcla el agua con el glicol según la proporción que elegiste y llena el calentador con cuidado. ¡Y listo! Así proteges tu equipo y te aseguras de que funcione bien incluso en invierno.
Mezcla de glicol y agua:
Para proteger tu calentador de toallas del frío, es fundamental usar la proporción adecuada según la temperatura más baja que esperes. Por ejemplo, si crees que bajará hasta -15 °C, lo ideal es mezclar un 30 % de glicol con un 70 % de agua. Mezcla bien ambos líquidos en un recipiente para que queden perfectamente integrados.
Llenado del calentador de toallas:
Llena el calentador poco a poco con la mezcla de glicol y agua. Un truco que me ha funcionado es usar un embudo, así evitas derrames y la tarea es mucho más sencilla. Hazlo despacio para que no se formen burbujas de aire dentro del sistema, que podrían afectar su funcionamiento.
Revisión del nivel de líquido:
Después de aproximadamente una hora, revisa el nivel del líquido dentro del calentador. Cuando esté a la temperatura máxima, el fluido debería quedar a unos 2 cm del borde superior del aparato.
Sellado:
Una vez que hayas llenado el calentador, coloca el tapón y el sistema de aireación para que quede bien cerrado y no se escape nada.
Después de llenar:
- Vigila: Mantén un ojo en el calentador tras usarlo para asegurarte de que no haya fugas.
- Revisiones periódicas: Es buena idea chequear el nivel del líquido de vez en cuando, especialmente antes de que llegue el invierno.
Consejos importantes de seguridad:
- Siempre consulta el manual de usuario para seguir las instrucciones específicas de tu modelo.
- Asegúrate de que el calentador esté instalado y usado según las indicaciones.
- Los niños no deben manejar el calentador sin la supervisión de un adulto.
El calentador de toallas puede alcanzar temperaturas cercanas a los 60 °C, así que es mejor manejarlo con cuidado para evitar quemaduras. Si sigues estos pasos, te aseguras de llenar correctamente tu calentador Hafa con glicol, lo que mantendrá su funcionamiento óptimo y seguro durante los meses fríos. La verdad, un buen mantenimiento es clave para que no te deje tirado cuando más lo necesitas.