Cómo limpiar tu placa de inducción AEG
Mantener tu placa de inducción AEG limpia no solo ayuda a que funcione mejor, sino que también alarga su vida útil. Te dejo una guía sencilla, basada en el manual de soporte, para que la tengas siempre impecable.
Seguridad ante todo
Antes de ponerte manos a la obra, asegúrate de que la placa esté apagada y completamente fría. Esto es clave para evitar quemaduras o cualquier accidente eléctrico. Ojo, nunca rocíes agua directamente sobre la superficie ni uses limpiadores a vapor, porque la humedad puede dañarla.
Limpieza diaria paso a paso
- Apaga y deja enfriar: No empieces hasta que la placa esté fría y apagada.
- Pasa un paño húmedo: Usa un trapo suave y ligeramente húmedo para limpiar la superficie. No te pases con el agua, que puede filtrarse y estropear la placa.
- Detergente suave si hace falta: Si ves que hay manchas difíciles, añade un poco de detergente suave al paño. Evita productos abrasivos, disolventes o estropajos metálicos, que pueden rayar la superficie.
- Seca bien: Para que no queden marcas ni manchas de agua, seca la placa con un paño suave después de limpiarla.
Con estos consejos, tu placa AEG estará siempre lista para cocinar sin problemas y luciendo como nueva.
Cómo eliminar manchas difíciles
Cuando te enfrentas a manchas rebeldes, como restos quemados o plástico derretido, hay algunos trucos que pueden salvarte el día:
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Actúa rápido: Si se derrite plástico, azúcar o cualquier cosa pegajosa, lo mejor es retirarlo de inmediato. Usa una espátula especial para vitrocerámicas de inducción, que está diseñada para no rayar la superficie. Colócala en un ángulo y ve raspando con cuidado para no dañar el cristal.
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Limpieza especializada: Para esas manchas que no se van con nada, un limpiador específico para placas de cerámica es tu mejor aliado. Aplica un poco con un paño suave y sigue las indicaciones del producto para que la superficie quede impecable sin riesgos.
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Solución casera con vinagre: Si notas marcas metálicas o manchas de agua, mezcla agua con vinagre y humedece un paño suave. Pasa el paño por la placa y luego seca con otro limpio. Es un truco sencillo que funciona genial.
Mantenimiento habitual
Para que tu placa de inducción AEG siempre esté en perfecto estado, la clave está en la constancia:
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Después de cocinar: Pasa un paño para limpiar cualquier resto y evitar que las manchas se fijen.
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Una vez a la semana: Dedica un poco más de tiempo a una limpieza profunda con un producto especial para vitrocerámicas.
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Revisa el estado: De vez en cuando, échale un vistazo para detectar grietas o daños. Si ves algo raro, mejor no la uses y llama a un técnico profesional para que la revise.
Así, tu placa te durará mucho más y cocinar será siempre un placer.
Limpieza del Ventilador Integrado y los Filtros
Si tu modelo incluye un ventilador integrado y filtros, es fundamental mantener estas piezas limpias para que todo funcione de maravilla:
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Quitar y limpiar la rejilla: Saca la rejilla que cubre el ventilador. Puedes limpiarla a mano con un detergente suave o, si prefieres, meterla en el lavavajillas para que quede impecable.
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Limpieza de los filtros: Consulta el manual para saber cómo extraer y limpiar los filtros. Normalmente, basta con enjuagarlos con agua tibia y dejarlos secar bien antes de volver a colocarlos.
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Regeneración de filtros: Muchos modelos AEG tienen filtros que se pueden regenerar hasta siete veces. Aquí te dejo cómo hacerlo:
- Limpia los filtros con regularidad, tal como te expliqué antes.
- Sécalos en el horno a 70 °C durante unos 20 a 30 minutos después de limpiarlos.
- Si tu placa tiene un indicador para los filtros, no olvides resetearlo siguiendo las instrucciones del manual.
Siguiendo estos pasos, tu placa de inducción AEG se mantendrá en perfecto estado, ofreciéndote un rendimiento fiable y eficiente durante mucho tiempo. La limpieza frecuente no solo ayuda a que luzca bien, sino que también mejora su funcionamiento. ¡A cocinar se ha dicho!