Cómo limpiar tu lavavajillas AEG
Mantener tu lavavajillas AEG en buen estado no solo ayuda a que funcione mejor, sino que también alarga su vida útil. Aquí te dejo una guía sencilla para que lo limpies de forma eficaz y segura.
Mantenimiento regular
Limpieza semanal
Cada semana, dedica unos minutos a revisar y limpiar algunas partes clave de tu lavavajillas. Esto evita que se acumulen restos que puedan afectar su rendimiento. Ten en cuenta lo siguiente:
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Limpia los filtros: Los filtros atrapan restos de comida y suciedad, y si se tapan, el lavado no será tan efectivo. Para limpiarlos, gira el filtro hacia la izquierda para sacarlo, lávalo con agua hasta eliminar todos los residuos y vuelve a colocarlo bien para que no haya problemas.
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Limpia la puerta y la goma: La junta que rodea la puerta suele acumular humedad y suciedad, lo que puede generar malos olores. Pásale un paño húmedo para mantenerla limpia y fresca.
Limpieza profunda mensual
Una vez al mes, es bueno hacer una limpieza más a fondo para que tu lavavajillas esté siempre a punto.
- Usa el programa "Cuidado de la máquina": Este ciclo especial limpia el interior del aparato, eliminando restos difíciles y manteniendo todo en perfecto estado.
La verdad, con estos cuidados básicos, evitarás sorpresas desagradables y tu lavavajillas te lo agradecerá con un mejor rendimiento y durabilidad.
Cómo poner en marcha el programa de cuidado de la máquina
Antes de arrancar, asegúrate de que los filtros y los brazos rociadores estén bien limpios. Para la limpieza, lo ideal es usar un desincrustante o un producto específico para lavavajillas. Cuando todo esté listo, inicia el programa, pero ojo, ¡no metas platos dentro! Esto es solo para mantenimiento.
Limpieza de los brazos rociadores
Si los brazos rociadores están obstruidos, la limpieza no será efectiva. Para dejarlos como nuevos:
- Saca el brazo rociador inferior tirando hacia arriba.
- Lávalo bajo el grifo y revisa que todos los agujeros estén libres.
- Si ves suciedad atascada, usa un palillo o algo similar para despejar los orificios.
- Repite este proceso con el brazo superior y, si tu modelo lo tiene, con el brazo del techo.
Cómo rellenar la sal y el abrillantador
Recarga del depósito de sal
Usar la sal adecuada es clave para evitar la cal. Aquí te dejo los pasos:
- Desenrosca la tapa del depósito de sal.
- Vierte sal regeneradora (nunca uses sal de cocina).
- Si es la primera vez que rellenas, añade aproximadamente un litro de agua.
- Asegúrate de cerrar bien la tapa para que no se escape nada.
Recarga del abrillantador
El abrillantador ayuda a que los platos se sequen sin marcas ni manchas. Para rellenarlo:
- Abre la tapa del dispensador de abrillantador.
- Llena hasta la marca de “MAX”.
- Limpia cualquier derrame para evitar que haga espuma durante el lavado.
La verdad, seguir estos pasos puede parecer un poco tedioso, pero te aseguro que vale la pena para mantener tu lavavajillas en perfecto estado y que tus platos salgan siempre impecables.
Consejos para el Uso Diario
Para que tu lavavajillas funcione sin problemas todos los días, te dejo algunos trucos que me han servido mucho:
- Carga bien los platos: Asegúrate de que nada bloquee los brazos rociadores y que los utensilios estén colocados para que el agua circule perfectamente.
- No enjuagues antes: Aunque parezca lógico, no hace falta aclarar los platos antes de meterlos; eso solo desperdicia agua.
- Elige el programa adecuado: Usa el ciclo de lavado que mejor se adapte a la suciedad que tengan tus platos.
- Revisa el detergente: Pon la cantidad justa según la carga y lo sucios que estén los platos.
¿Problemas con la limpieza?
Si notas que el lavavajillas no limpia como debería, prueba esto:
- Verifica el suministro de agua: Confirma que la llave esté abierta y que la presión sea la correcta.
- Limpia el filtro y los brazos rociadores: A veces se tapan y eso impide que el agua fluya bien.
- Ajusta el ablandador de agua: Si tienes agua dura, es importante configurar bien el suavizador según la dureza de tu zona.
En resumen
Siguiendo estos consejos, tu lavavajillas AEG te durará más y funcionará mejor. Un mantenimiento regular, cargarlo correctamente y usar los productos adecuados son la clave para que siempre quede todo impecable y tu electrodoméstico te acompañe por mucho tiempo.
Recuerda que mantener tu lavavajillas limpio no solo hace que tus platos salgan más relucientes, sino que también ayuda a que el aparato dure mucho más tiempo. La verdad, a veces nos olvidamos de esta tarea, pero es clave para evitar averías y que el rendimiento sea siempre el mejor. Más vale dedicarle un poco de tiempo a la limpieza que tener que gastar en reparaciones o en un reemplazo prematuro.