Cómo limpiar el interior de tu nevera para evitar malos olores
Mantener la nevera limpia es clave para que la comida se conserve fresca y no aparezcan esos olores desagradables que a nadie le gustan. Si tienes una nevera de la marca Point, te cuento unos pasos sencillos y consejos prácticos para dejar el interior impecable.
¿Por qué es tan importante limpiar?
La verdad, la comida en la nevera puede echarse a perder y eso genera olores que no se van con nada. Además, si hay algún derrame o gota que se queda ahí, se convierte en el lugar perfecto para que crezcan bacterias y moho, y eso solo empeora el olor. Limpiar con regularidad ayuda a que tu nevera huela bien y, de paso, mantiene la calidad de tus alimentos.
Antes de empezar a limpiar
Para que todo salga bien y sin riesgos, sigue estos pasos:
- Desenchufa la nevera: Siempre es mejor desconectarla antes de limpiar para evitar accidentes.
- Vacía todo: Saca la comida, las bebidas, las bandejas y los cajones para poder limpiar a fondo.
- Prepara tus materiales: Necesitarás paños suaves o esponjas, dos cucharadas de bicarbonato de sodio, un litro de agua tibia y, si quieres, un atomizador para facilitar la aplicación.
Pasos para limpiar
- Haz la mezcla limpiadora: En un recipiente o en el atomizador, mezcla dos cucharadas de bicarbonato con un litro de agua tibia. Esta solución es genial para eliminar olores y limpiar sin dañar las superficies.
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Cómo limpiar y mantener tu refrigerador usando bicarbonato de sodio
El bicarbonato de sodio es un aliado natural para eliminar malos olores. La verdad, es un truco casero que nunca falla.
Limpia las superficies internas:
Con un paño suave o una esponja humedecida en una solución de bicarbonato, limpia todas las superficies dentro del refrigerador, incluyendo estantes y paredes. Pon especial atención a las manchas o derrames que puedan haber quedado.
Enjuaga bien:
Después de pasar el paño con la mezcla, es importante que enjuagues con agua limpia para quitar cualquier residuo de bicarbonato. Un paño húmedo y limpio funciona perfecto para esto.
Seca el interior:
Pasa un trapo seco para eliminar la humedad y deja la puerta abierta un rato para que se airee bien antes de volver a enchufar el refrigerador. Esto ayuda a que todo quede bien seco y sin humedad.
Lava estantes y cajones:
Si puedes sacar los estantes y cajones, lávalos con agua tibia y jabón. Luego enjuágalos y sécalos bien antes de volver a colocarlos.
Revisa las gomas de la puerta:
No olvides limpiar las gomas con un paño húmedo, ya que ahí se acumula suciedad y restos de comida que pueden causar olores desagradables.
Consejos para mantenerlo siempre fresco
Usa recipientes herméticos para guardar carnes crudas, pescados y alimentos con olores fuertes. Así evitas que esos aromas se esparzan por todo el refrigerador.
Más vale prevenir que curar, ¿no crees?
Consejos para Mantener tu Refrigerador Siempre Fresco
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Limpia los derrames al instante: Cuando algo se derrame, no lo dejes para después. Limpiar rápido evita que se acumulen residuos que luego causan malos olores.
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Revisa el contenido regularmente: Dedica un momento cada semana para revisar qué hay dentro de tu nevera. Saca todo lo que esté pasado o en mal estado para que todo se mantenga fresco y en buen estado.
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Cuidado con los alimentos que huelen fuerte: Algunos alimentos tienen olores más intensos y pueden impregnar tu refrigerador. Piensa bien dónde y cómo los guardas para evitar que el olor se extienda.
¿Cuándo hacer una limpieza profunda?
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Si vas a dejar la nevera vacía por mucho tiempo: Apágala, descongélala y deja la puerta abierta. Así evitas que se forme moho y malos olores.
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Incluye la limpieza en el mantenimiento habitual: No esperes a que se ensucie mucho. Hacer una limpieza periódica ayuda a que tu refrigerador funcione mejor y dure más.
Siguiendo estos consejos, tendrás un refrigerador que huele bien y mantiene tus alimentos en óptimas condiciones. Además, un interior limpio contribuye a un ambiente más saludable en casa. ¡Más vale prevenir que curar!