Cómo Guardar tu Bomba Sumergible AL-KO de Forma Segura

Si tienes una bomba sumergible, como las que fabrica AL-KO, es fundamental saber cómo guardarla bien para que te dure y funcione sin problemas la próxima vez que la uses. Aquí te dejo los pasos clave para que la almacenes sin complicaciones:

Limpia la bomba a fondo

Saca toda el agua que quede dentro: Asegúrate de que no quede ni una gota de agua en la bomba. Si la usaste en agua sucia o con productos como cloro, lo mejor es enjuagarla con agua limpia para eliminar cualquier residuo.
Revisa y limpia las ranuras de succión: Estas zonas suelen acumular suciedad o restos, así que límpialas bien para evitar problemas después.

Déjala secar completamente

Pon la bomba en un lugar seco y deja que se airee hasta que esté totalmente seca. Esto es súper importante para evitar que se forme moho o que se oxide, sobre todo si vives en un sitio donde hace frío y puede haber heladas.

Cuida el cable de alimentación

Desconecta siempre la bomba antes de guardarla para evitar accidentes.
Al enrollar el cable, hazlo con cuidado para que no se doble ni se enrede, así evitarás que se dañe la cubierta o los conectores.

Con estos consejos, tu bomba AL-KO estará lista para la próxima vez que la necesites, funcionando como el primer día. ¡Más vale prevenir que lamentar!

Cómo Preparar tu Bomba para el Frío

Si vives en un lugar donde las temperaturas bajan de cero, es fundamental que tomes algunas precauciones para evitar que el frío dañe tu bomba.

Vacía toda el agua: Lo primero es asegurarte de sacar hasta la última gota de agua que quede dentro de la bomba. Si queda agua y se congela, puede romper piezas internas y causarte un buen problema.
Guárdala en un lugar adecuado: Busca un sitio fresco y seco, lejos del sol directo y de la humedad. Esto ayudará a que la bomba se mantenga en buen estado durante mucho tiempo. Si puedes, ponla en un lugar elevado, así evitas que se moje si hay alguna filtración o inundación.
Revísala de vez en cuando: Aunque esté guardada, no está de más echarle un vistazo de vez en cuando para asegurarte de que no tenga daños visibles, como grietas o cables pelados. Y antes de volver a usarla, haz una prueba rápida para comprobar que funciona bien.
Sigue las indicaciones del fabricante: Cada bomba puede tener sus particularidades, así que no olvides consultar el manual de AL-KO para seguir sus recomendaciones específicas y cuidar tu equipo como se merece.

La verdad, más vale prevenir que lamentar, y con estos consejos tu bomba estará lista para la próxima temporada sin sorpresas desagradables.

Resumen

Guardar correctamente tu bomba sumergible AL-KO es clave para que te dure mucho más tiempo y funcione siempre que la necesites. La verdad, con solo seguir unos pasos sencillos —como limpiarla bien, secarla a conciencia, asegurarte de que no quede ni una gota de agua, desconectar el cable, guardarla en un lugar seguro y revisarla de vez en cuando— evitarás muchos problemas comunes que suelen aparecer cuando no se almacena bien.

Así que, más vale prevenir que curar: ten siempre presente este pequeño ritual para que tu bomba esté lista para la acción cuando la vayas a usar.