Cómo Filtrar el Aceite en una Freidora Point
Freír alimentos puede ser todo un placer para el paladar, pero manejar el aceite no siempre es tan sencillo como parece. Cuidar bien el aceite no solo es clave para la seguridad, sino también para que tus frituras queden siempre deliciosas y con buena calidad. Si tienes una freidora Point, te dejo unos pasos fáciles para filtrar el aceite y mantenerlo en óptimas condiciones.
¿Por qué es importante filtrar el aceite?
Filtrar el aceite ayuda a eliminar esos restos de comida y otras impurezas que, si se quedan, pueden arruinar el sabor de tus platos y hacer que el aceite se deteriore más rápido. Además, limpiar y filtrar la freidora con regularidad contribuye a cocinar de forma más saludable y a que el aceite te dure mucho más tiempo.
Guía paso a paso para filtrar el aceite
-
Primero, la seguridad
- Apaga y desconecta la freidora: Nunca olvides apagarla y desenchufarla antes de manipularla para evitar accidentes con el aceite caliente.
- Deja que el aceite se enfríe: Es fundamental esperar a que el aceite esté completamente frío para no quemarte. No muevas la freidora hasta que esté a temperatura segura.
-
Prepara todo para guardar el aceite
- Saca la cesta: Abre la tapa y retira con cuidado la cesta para tener acceso libre al aceite.
-
Filtra el aceite
- Usa un colador fino: Vierte el aceite lentamente a través de un colador de malla fina hacia un recipiente limpio y seco. Así eliminarás los restos de comida y mantendrás el aceite listo para usar otra vez.
Con estos consejos, tu aceite estará siempre en buen estado y tus frituras saldrán perfectas. ¡Más vale prevenir que curar!
Cómo mantener el aceite limpio y listo para usar
Para que el aceite te dure más y esté siempre en buen estado, es fundamental filtrarlo bien después de cada uso. Si tienes un filtro de café o un trozo de tela tipo gasa, ponlo dentro del colador para que la filtración sea aún más fina y elimines hasta las partículas más pequeñas.
Limpieza de la freidora
- Vacía la freidora: Una vez que hayas filtrado el aceite, saca el resto que quede dentro y guárdalo en un recipiente adecuado.
- Limpia la cubeta interior: Usa una toalla de papel para quitar los restos de aceite y luego pasa un paño humedecido en agua tibia con jabón para dejarla impecable. Ojo, nunca metas la freidora ni sus partes eléctricas en agua, eso puede dañarla.
Limpieza final
- Secado: Pasa un trapo limpio y húmedo por toda la freidora y déjala secar bien antes de volver a usarla o guardarla.
- Lava la cesta: La cesta y el mango también necesitan un buen lavado con agua tibia y jabón, y asegúrate de secarlos completamente para evitar malos olores o corrosión.
Cómo guardar el aceite filtrado
Si no vas a usar el aceite de inmediato, lo mejor es guardarlo en un lugar fresco y seco, preferiblemente en la nevera. Usa un recipiente que cierre bien para que el aceite no pierda calidad ni se contamine.
Consejos para cuidar la calidad del aceite
- Elige un buen aceite: Siempre empieza con un aceite de calidad para freír, porque no solo mejora el sabor de tus comidas, sino que también dura más tiempo sin estropearse.
La verdad, mantener el aceite limpio y la freidora bien cuidada puede parecer un rollo, pero a la larga te ahorra dinero y te garantiza platos más sabrosos y saludables.
Cuida tu aceite para freír como un profesional
-
No mezcles aceites diferentes: Combinar distintos tipos de aceite puede cambiar el sabor de tus comidas y también dificulta que el aceite se filtre bien para reutilizarlo. La verdad, es mejor usar siempre el mismo tipo para evitar sorpresas.
-
Filtra el aceite con regularidad: Hazte el hábito de colar el aceite después de usarlo unas cuantas veces o cuando veas que empiezan a quedar restos de comida flotando. Esto ayuda a mantenerlo limpio y listo para la próxima fritura.
-
Atento al color y al olor: Si notas que el aceite se oscurece mucho o empieza a oler raro, es señal de que ya es hora de cambiarlo, aunque lo hayas filtrado. No vale la pena arriesgarse con un aceite en mal estado.
Siguiendo estos consejos sencillos, mantendrás tu aceite en buen estado y tu freidora Point funcionando como nueva. Además, un mantenimiento constante no solo mejora el sabor de tus platillos, sino que también hace que cocinar sea más seguro y agradable.
¡A disfrutar de unas frituras perfectas!