Cómo eliminar la cal del depósito de agua de tu horno Smeg
Si tienes un horno Smeg que incluye un depósito de agua, es fundamental mantenerlo limpio y libre de cal para que funcione a la perfección. La acumulación de minerales puede afectar tanto el rendimiento como la vida útil del aparato. Te cuento cómo descalcificarlo de forma correcta para evitar problemas.
¿Por qué es tan importante descalcificar?
Con el tiempo, los minerales que trae el agua se van pegando en el depósito. Si no lo limpias con regularidad, esos depósitos pueden hacer que el horno rinda menos o incluso que falle. A veces, el propio horno te avisará cuando necesite una descalcificación.
¿Cada cuánto hay que hacerlo?
Lo ideal es seguir las indicaciones que te muestra la pantalla del horno. Pero si vives en una zona con agua dura, mejor hacerlo un poco más seguido, por ejemplo, cada pocos meses.
Lo que vas a necesitar
- 100 gramos de ácido cítrico
- 650 ml de agua
- Una jarra para mezclar
- Un embudo (que suele venir con el horno)
- Una bandeja profunda para recoger el agua sucia
Paso a paso para descalcificar
- Prepara la mezcla: En la jarra, disuelve bien los 100 gramos de ácido cítrico en los 650 ml de agua.
- Abre la puerta del horno: Este es el primer paso para empezar con el proceso.
Y listo, con estos pasos básicos ya estás en camino de mantener tu horno Smeg en las mejores condiciones, evitando que la cal le juegue una mala pasada.
Cómo preparar la bandeja profunda para la descalcificación
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Coloca la bandeja profunda en la tercera rejilla desde abajo dentro del horno. Asegúrate de que quede pegada a la pared trasera para recoger cualquier líquido que pueda caer.
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Entra al menú de funciones especiales y busca la opción de descalcificación. Cuando la encuentres, pulsa el botón para seleccionarla.
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Confirma que quieres iniciar la descalcificación presionando el botón nuevamente.
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El horno te pedirá que vacíes el depósito de agua. Confirma esta acción y verás cómo el agua comienza a caer en la bandeja profunda.
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Espera pacientemente a que todo el agua se drene por completo. Cuando termine, escucharás un pitido que te avisará que esta etapa ha finalizado.
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Vacía la solución descalcificadora que quedó en la bandeja. Ten cuidado, porque puede estar caliente.
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Ahora toca enjuagar el depósito. Para esto, abre la puerta, saca el cajón de llenado y coloca el embudo.
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Llena con un litro de agua fría del grifo (mejor que no sea destilada y que tenga poco cloro) hasta que el agua rebose un poco dentro del horno. Esto ayuda a eliminar cualquier resto de la solución anterior.
Cómo iniciar la función de enjuague:
Primero, cierra bien la puerta y pulsa el botón para activar la limpieza del circuito de agua. Luego, solo tienes que esperar a que termine el ciclo y dejar que el agua se drene por completo.
Limpieza final:
No olvides secar cualquier gota de agua que haya quedado dentro del horno para evitar que se acumule humedad y cause problemas.
Consejos para obtener mejores resultados:
- Usa agua suavizada: Si el agua de tu casa es dura, te recomiendo usar agua suavizada para evitar que se formen depósitos de minerales.
- Presta atención a las alertas del sistema: Siempre que el horno te avise sobre la necesidad de descalcificar o hacer mantenimiento, no lo ignores.
- Mantenimiento regular: Cuidar tu electrodoméstico con frecuencia ayuda a que funcione mejor y dure más tiempo.
En resumen:
Siguiendo estos pasos, podrás descalcificar el depósito de agua de tu horno Smeg sin complicaciones, manteniéndolo en perfecto estado para cocinar. Un mantenimiento constante te permitirá disfrutar de todas las ventajas de tu horno sin sorpresas desagradables. Y si alguna vez te pierdes en el proceso, recuerda que el manual de usuario está ahí para guiarte según el modelo que tengas.