Consejos Prácticos

Cómo cuidar tu silla de ratán Hillerstorp: guía rápida y efectiva

Cómo cuidar tu silla de ratán Hillerstorp

Si te has hecho con una silla de ratán de Hillerstorp, ¡felicidades! Has elegido un mueble ideal para el exterior. Para que tu silla se mantenga bonita y te acompañe durante mucho tiempo, es fundamental darle un buen cuidado. Aquí te dejo algunos consejos prácticos para que mantengas tu silla Hillerstorp en perfecto estado.

Conoce tu silla de ratán

Hillerstorp utiliza una fibra especial llamada Quato™ en sus muebles de ratán. Esta fibra es famosa por ser muy resistente y aguantar bien el frío, el calor y la radiación UV. La estructura de la silla combina polietileno y polipropileno de alta calidad, tejidos alrededor de un armazón metálico robusto.

Limpieza habitual

Para que tu silla luzca siempre genial, es importante limpiarla con regularidad. Aquí te dejo unos pasos sencillos:

  • Usa un detergente suave: Mezcla un poco de detergente suave con agua. Humedece un paño o una esponja y limpia todas las superficies de la silla.

  • Cuida los detalles de madera: Si tu silla tiene partes de madera, no las olvides. Aplica un buen aceite para maderas duras que ayude a protegerlas de la humedad y el desgaste.

La verdad, con un poco de atención y estos cuidados básicos, tu silla de ratán puede durar años sin perder su encanto.

Consejos para Guardar tu Silla de Ratán

Guardar bien tu silla de ratán es clave para que te dure mucho tiempo, sobre todo cuando no la usas en ciertas épocas del año.

  • Guárdala dentro de casa en invierno: Si puedes, mete la silla en un lugar cerrado durante los meses fríos. Así la proteges de la lluvia, el frío y el viento, que pueden dañarla.

  • Evita ponerle peso encima: Cuando la guardes, no pongas cosas pesadas sobre la silla. El ratán tiene cierta flexibilidad, pero si lo presionas mucho, puede deformarse y perder su forma original.

Usa fundas para muebles

Para alargar la vida de tu silla, lo mejor es cubrirla con una funda adecuada siempre que puedas. Esto ayuda a mantenerla limpia y seca, protegiéndola de la suciedad y la humedad. Eso sí, elige una funda que le quede bien ajustada para que no se mueva ni se caiga.

Más cuidados que no vienen mal

  • Pulir la superficie: Si ves que la silla ha perdido brillo, puedes devolverle la vida usando cera para coches o barcos. Esto no solo mejora su aspecto, sino que también crea una capa protectora extra.

  • Revisiones según la temporada: Cada vez que cambie la estación, échale un vistazo a la silla. Busca señales de desgaste o daños para arreglarlos a tiempo y evitar problemas mayores.

La verdad, con un poco de atención y estos trucos, tu silla de ratán puede lucir como nueva durante mucho más tiempo. ¡Más vale prevenir que curar!

Conclusión

Cuidar tu silla de ratán Hillerstorp no tiene por qué ser complicado. Si sigues unos consejos sencillos, podrás mantenerla en perfecto estado durante muchas temporadas. La clave está en limpiarla con regularidad, guardarla adecuadamente y protegerla con fundas cuando no la uses. Así, conservarás tanto su belleza como su funcionalidad.

Disfruta de tu mobiliario de exterior y de toda la comodidad que te ofrece, ¡vale la pena!