Consejos Prácticos

Cómo cuidar tu lavavajillas Bosch: guía rápida y efectiva

Cómo cuidar tu lavavajillas Bosch

Mantener tu lavavajillas Bosch en perfecto estado no es complicado, pero sí requiere un poco de atención regular. Si le das un buen mantenimiento, no solo alargarás la vida del aparato, sino que también te asegurarás de que funcione a tope, dejando tus platos impecables cada vez. Aquí te dejo los pasos clave para que le hagas un buen "cuidado de máquina" a tu lavavajillas.

  1. Ejecuta el programa de cuidado de máquina

Los lavavajillas Bosch traen un programa especial llamado "Cuidado de Máquina", pensado para limpiar a fondo el interior del electrodoméstico. Este programa ayuda a eliminar la cal y los restos de comida que se van acumulando con el tiempo.

Pasos para usar el programa de cuidado:

  • Limpia la suciedad gruesa: Antes de poner en marcha el programa, pasa un paño húmedo para quitar cualquier suciedad visible dentro del lavavajillas.
  • Revisa y limpia los filtros: Asegúrate de que los filtros estén limpios. Sácalos y enjuágalos bajo el grifo para eliminar cualquier residuo.
  • Comprueba los brazos rociadores: Quita los brazos rociadores de arriba y abajo para verificar que los orificios no estén tapados.
  • Añade el producto de limpieza: Coloca dentro del lavavajillas un producto específico para el cuidado de máquina, que ayudará a dejarlo reluciente y libre de depósitos.

Con estos cuidados, tu lavavajillas Bosch seguirá funcionando como el primer día, y tus platos siempre saldrán perfectos. La verdad, dedicarle un poco de tiempo a esto vale mucho la pena.

Cómo cuidar tu lavavajillas para que dure más

1. Usa un limpiador especial para la máquina

Vierte un producto adecuado para limpiar lavavajillas en el compartimento del detergente. Luego, busca en el panel de control el programa llamado “Cuidado de la máquina” y actívalo con el botón correspondiente. Pulsa el botón de inicio y deja que el ciclo se complete por completo. Cuando termine, la luz indicadora de limpieza debería apagarse. Lo ideal es hacer este proceso cada dos meses o cuando el propio aparato te lo sugiera.

2. Limpieza frecuente de los filtros

Los filtros son clave para que tu lavavajillas funcione bien, ya que atrapan restos de comida y suciedad. Para limpiarlos, primero gira el filtro grueso en sentido contrario a las agujas del reloj para sacarlo. Después, retira con cuidado el microfiltro y el filtro fino. Enjuágalos bajo el grifo hasta eliminar cualquier residuo. Finalmente, vuelve a montar los filtros y colócalos en su sitio asegurándote de que queden bien fijados.

3. Mantén limpias las aspas rociadoras

Las aspas que lanzan el agua deben estar libres de obstrucciones para que el lavado sea efectivo. A veces, restos de comida pueden tapar los orificios y reducir la potencia del chorro, así que revisa y limpia estas piezas regularmente.

Cómo limpiar los brazos rociadores de tu lavavajillas

  • Quita los brazos rociadores: Afloja el brazo superior desenroscándolo y saca el brazo inferior para poder limpiarlo bien.
  • Revisa si hay obstrucciones: Pasa los rociadores bajo el grifo y fíjate si tienen restos o suciedad que bloqueen el paso del agua. Si ves algo, límpialo con cuidado.
  • Vuelve a colocarlos: Una vez limpios, pon los brazos rociadores en su sitio original.

Limpia el interior

Para mantener todo higiénico y evitar olores desagradables, pasa un paño húmedo por las gomas de la puerta y el panel de control. Un consejo que me ha servido mucho: si no vas a usar el lavavajillas por un tiempo, deja la puerta un poco abierta para que no se acumule ese olor a humedad tan molesto.

Descalcifica tu lavavajillas

Si notas que aparecen manchas blancas dentro del aparato o en los platos, probablemente sea cal. Es importante que hagas una descalcificación para que tu lavavajillas funcione bien y dure más.

  • Usa productos específicos: Compra un descalcificador pensado para lavavajillas.
  • Sigue las instrucciones: Cada producto tiene su modo de uso, así que lee bien la etiqueta para no equivocarte.

Consejos para el mantenimiento diario

  • Revisa y rellena: Mantén siempre a buen nivel el abrillantador y el detergente para que la limpieza sea óptima y tus platos queden perfectos.

Revisa el Suministro de Agua y el Drenaje

  • Echa un vistazo a las mangueras para asegurarte de que no estén dobladas ni bloqueadas, porque eso puede impedir que el agua fluya bien.

Carga Correctamente los Platos

  • Si colocas los platos de forma incorrecta, puedes tapar los brazos rociadores y eso afecta cómo limpia la máquina.

7. Programa Revisiones Periódicas

Para que tu lavavajillas Bosch siga funcionando como el primer día, es buena idea hacer estas revisiones de mantenimiento con regularidad. Lo ideal es hacerlo cada dos meses, o incluso más seguido si sueles lavar platos muy sucios.

Conclusión

Cuidar tu lavavajillas Bosch no solo ayuda a que funcione mejor, sino que también alarga su vida útil. Siguiendo estos consejos sencillos, tendrás platos limpios y relucientes una y otra vez. Haz del programa de mantenimiento una cita fija y mantén tu electrodoméstico en plena forma.

Lee el Manual de Usuario

Para más información, no olvides consultar el manual de tu lavavajillas Bosch Serie 4 SBH4ECX10E integrado.