Guía para Cambiar el Cartucho de tu Grifo ORAS
Si tu grifo ORAS del lavabo empieza a gotear o no funciona como debería, probablemente sea hora de cambiar el cartucho. Es un problema bastante común y, la verdad, hacerlo tú mismo puede ahorrarte un buen dinero en el fontanero. En esta guía te voy a explicar paso a paso cómo reemplazar el cartucho del grifo ORAS Saga de forma sencilla y efectiva.
¿Qué es un cartucho de grifo?
El cartucho es esa pieza que controla tanto el flujo como la temperatura del agua que sale por el grifo. Con el uso diario, es normal que se desgaste y eso puede causar fugas o que el grifo no funcione bien. Cambiar el cartucho suele ser la solución más rápida y fácil.
¿Por qué cambiar el cartucho?
Hay varias señales que te indican que ya es momento de hacer el cambio:
- Goteo constante: Si ves que el agua sigue cayendo por el mango o la base del grifo.
- Dificultad para girar: Cuando el mango se pone duro o cuesta moverlo.
- Flujo irregular: Si el agua no sale de forma continua o la temperatura cambia sin avisar.
Si notas alguna de estas cosas, no te preocupes, que con un poco de paciencia y esta guía, podrás dejar tu grifo como nuevo.
Herramientas que vas a necesitar
Antes de ponerte manos a la obra con el cambio, asegúrate de tener a mano estas herramientas:
- Una llave inglesa
- Un destornillador
- Toallas o un recipiente pequeño para recoger el agua que pueda salir
- El cartucho de repuesto (ojo, que sea el modelo correcto para tu mezcladora ORAS)
Pasos para cambiar el cartucho de la llave ORAS
Aquí te dejo una guía paso a paso para que el cambio te salga sin complicaciones:
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Corta el suministro de agua
Antes de empezar, lo más importante es cerrar la llave de paso para evitar que se arme un lío con el agua. Normalmente, las válvulas están justo debajo del fregadero. -
Vacía la llave
Abre el grifo para que se vaya el agua que quede dentro. Así trabajarás más cómodo y sin sorpresas. -
Quita la manija
Con el destornillador, saca la manija del grifo. A veces hay que quitar una tapa decorativa para poder acceder al tornillo que la sujeta. -
Saca el cartucho viejo
Una vez que la manija esté fuera, verás el cartucho que está dentro. Usa la llave inglesa para aflojarlo y sacarlo con cuidado, sin dañar las piezas alrededor. -
Coloca el cartucho nuevo
Toma el cartucho nuevo y ponlo en su lugar con cuidado. Asegúrate de que encaje bien y apriétalo con la llave inglesa para que quede firme. -
Vuelve a montar y prueba
(Aunque no estaba en el texto original, es buena idea mencionar que después de instalar el cartucho, vuelvas a poner la manija, abras la llave de paso y pruebes que todo funcione bien y no haya fugas.)
Vuelve a Colocar la Manija
Pon la manija en su lugar y atorníllala bien. No te olvides de volver a poner las tapas decorativas que hayas quitado antes, que a veces se nos pasan.
Abre el Suministro de Agua
Cuando todo esté en su sitio, abre de nuevo la llave del agua. Luego, abre el grifo y fíjate bien si hay alguna fuga.
Prueba el Grifo
Enciende y apaga el grifo para asegurarte de que funciona correctamente. Comprueba que el agua fluye sin problemas y que la temperatura es la adecuada.
Consejos para un Cambio Exitoso
- Siempre lleva contigo el cartucho viejo cuando vayas a comprar uno nuevo. Así te aseguras de que compras el modelo correcto.
- Si al sacar el cartucho notas que se resiste, no lo fuerces. A veces con un poco de movimiento suave se suelta.
- Ten a mano una toalla para secar cualquier gota de agua que pueda escaparse durante el proceso.
Para Terminar
Cambiar el cartucho de tu mezcladora ORAS puede ser más sencillo y económico de lo que imaginas. Siguiendo estos pasos, podrás dejar tu grifo como nuevo sin necesidad de llamar a un profesional. Eso sí, antes de empezar, confirma que tienes el cartucho correcto. Y si ves que el problema es más complicado, no dudes en consultar a un fontanero de confianza.
Mantener tu grifo en buen estado y cambiar las piezas cuando sea necesario es la mejor forma de asegurarte de que te dure muchos años. La verdad, un poco de cuidado regular puede evitarte dolores de cabeza y gastos innecesarios más adelante. A veces, con solo reemplazar una junta o limpiar alguna parte, puedes prolongar la vida útil de tu grifo sin complicaciones. Más vale prevenir que curar, ¿no crees?