Cómo Cambiar el Acristalamiento en un Invernadero Vitavia
Cuidar tu invernadero es fundamental para que tus plantas crezcan sanas y fuertes, y una de las tareas más importantes es cambiar el acristalamiento cuando sea necesario. Si tienes un invernadero Vitavia, ya sea con paneles de policarbonato o de vidrio, esta guía te va a ayudar a entender cómo hacerlo de forma segura y efectiva.
Seguridad ante todo
Antes de ponerte manos a la obra, hay que tener en cuenta algunas recomendaciones para evitar accidentes:
- Equipo de protección: No te olvides de ponerte gafas protectoras, guantes resistentes y zapatos cerrados para protegerte de posibles cortes o golpes.
- Manejo del vidrio roto: Si el acristalamiento está roto, trata el vidrio con mucho cuidado. Los pedazos pueden ser peligrosos, así que asegúrate de desecharlos de forma segura.
- Trabajar en equipo: Lo ideal es que sean dos personas las que hagan el cambio, sobre todo si los paneles son grandes o pesados.
- No uses fuerza bruta: Si algo no sale fácil, mejor no forzar. A veces es mejor pedir ayuda o revisar bien cómo desmontar para evitar daños o accidentes.
Herramientas que Vas a Necesitar
Antes de ponerte manos a la obra, asegúrate de tener a mano estas herramientas:
- Destornilladores (plano y de cruz PH2)
- Llave de vaso o inglesa de 10 mm
- Llave combinada de 10 mm
- Cuchillo
- Cinta métrica
- Nivel de burbuja
Cómo Quitar el Acristalamiento Viejo
- Identifica los paneles: Primero, localiza cuáles paneles necesitan ser cambiados, ya sean láminas de policarbonato o cristales.
- Quita los clips: Retira los clips que sujetan los paneles. En los invernaderos Vitavia, suelen usar clips de resorte o de retención para el acristalamiento.
- Saca el panel con cuidado: Levanta con suavidad el panel antiguo de su marco. Si está roto, no olvides ponerte guantes y manipular los fragmentos con precaución.
Instalando el Nuevo Acristalamiento
Para paneles de vidrio:
- Prepara los sellos: Coloca los sellos de acristalamiento sobre los marcos de aluminio, asegurándote de que estén cortados a la medida correcta.
- Coloca el vidrio: Empieza por el techo, situando el vidrio en los aleros.
- Fija el vidrio: Usa los clips de resorte para mantener el vidrio en su lugar. Continúa colocando los siguientes paneles, asegurándote de que se solapen un poco y que los clips de retención los sujeten bien.
- Arregla los paneles laterales: Para los lados del invernadero, comienza desde abajo y ve subiendo poco a poco.
Para las láminas de policarbonato:
Si vas a cambiar el vidrio por láminas de policarbonato, lo primero es revisar las instrucciones que vienen con ellas. Pero para que te hagas una idea, aquí te dejo algunos consejos prácticos:
- Coloca los paneles: Desliza las láminas de policarbonato dentro de las guías que ya tienes preparadas.
- Usa los clips adecuados: Asegúrate de emplear los clips que recomiendan para este tipo de instalación y sigue al pie de la letra el método que te indican.
Detalles finales
Cuando ya tengas todos los paneles bien sujetos:
- Revisa que no haya huecos: Es importante que no queden espacios por donde pueda colarse el viento o algún insecto. Si ves que hace falta, aplica silicona neutra para sellar los bordes (ojo, la silicona no viene incluida con el invernadero).
- Chequea tu trabajo: Verifica que todo esté firme y bien alineado. Un nivel de burbuja te puede ayudar a asegurarte de que la instalación está perfecta.
Consejos para el mantenimiento
Limpia tu invernadero con regularidad usando un detergente suave para que las láminas mantengan su transparencia. También es fundamental que las estructuras y las guías estén libres de suciedad o restos que puedan dañar las láminas con el tiempo.
Para terminar
Cambiar el acristalamiento de tu invernadero Vitavia es más sencillo de lo que parece si sigues estos pasos con cuidado. Mantenerlo en buen estado es clave para que tus plantas crezcan sanas y felices.
Si te encuentras con algún problema, no dudes en contactar al vendedor para que te eche una mano. La verdad es que mantener tu invernadero en buen estado es clave para que tus plantas crezcan sanas y que tu experiencia de jardinería sea mucho más satisfactoria y productiva. ¡Más vale prevenir que curar!