Consejos para arreglar la puerta de tu nevera AEG que no cierra bien
Si notas que la puerta de tu nevera AEG no termina de cerrar como debería, no te preocupes, es un problema bastante común y que suele tener solución con unos pasos sencillos. Te dejo una guía práctica para que puedas resolverlo y tu nevera funcione como debe.
¿Por qué es tan importante?
Una puerta que no cierra bien puede traer varios dolores de cabeza: hace que la nevera consuma más energía, aumenta la posibilidad de que la comida se estropee y puede provocar que se forme escarcha dentro. Por eso, mejor ponerse manos a la obra cuanto antes para evitar estos líos.
Pasos para solucionarlo
- Revisa si hay algo que impida el cierre
Echa un vistazo dentro de la nevera y asegúrate de que no haya ningún objeto que esté bloqueando la puerta. A veces, envases grandes o cosas que están en los estantes de la puerta pueden ser los culpables.
- Examina la goma de la puerta
La goma o sello de la puerta es la que mantiene el frío adentro. Si está sucia o dañada, puede que la puerta no cierre bien.
Cómo limpiar la goma:
- Apaga y desenchufa la nevera para estar seguro.
- Usa un paño húmedo con un poco de detergente suave y limpia la goma con cuidado.
Limpieza y mantenimiento de la puerta del frigorífico
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Paso 3: Pasa un paño limpio y húmedo para eliminar cualquier resto de jabón. No dejes que queden residuos, que luego pueden atraer suciedad.
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Paso 4: Seca bien la goma del sello antes de cerrar la puerta. Esto ayuda a que quede bien sellada y evita problemas de humedad.
Revisa el estado del sello
- Fíjate si tiene grietas o algún desgarro. Si la goma está dura o rígida, puede que no se comprima bien y la puerta no cierre como debería.
Nivelar el frigorífico
Si el frigorífico no está bien nivelado, la puerta puede quedar desajustada y no cerrar del todo.
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Paso 1: Usa un nivel para comprobar que el aparato está recto.
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Paso 2: Ajusta las patas del frigorífico. La mayoría se pueden girar para subir o bajar cada esquina.
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Paso 3: Procura que el frigorífico quede un poco inclinado hacia atrás, así la puerta se cierra sola con más facilidad.
Ajustar las bisagras de la puerta
Con el tiempo, las bisagras pueden aflojarse o desalinearse.
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Paso 1: Abre la puerta y localiza los tornillos de las bisagras.
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Paso 2: Con un destornillador, aprieta los tornillos que estén flojos.
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Paso 3: Si la puerta sigue sin quedar bien, puede que necesites ajustar las bisagras. En ese caso, revisa el manual o consulta a un profesional para no arriesgarte.
Evita sobrecargar las baldas de la puerta
Poner objetos muy pesados en las baldas de la puerta puede deformar la alineación y hacer que no cierre bien.
Reparte el peso de forma equilibrada y evita guardar botellas o recipientes muy pesados en esas baldas.
Contacta con el Servicio Técnico
Si ya probaste todo lo que te contamos antes y la puerta sigue sin cerrar bien, quizás sea momento de llamar a AEG o a un centro de servicio autorizado. A veces el problema es más complicado y puede estar en el mecanismo de la puerta o en alguna pieza interna que no se ve a simple vista.
Consejos para evitar problemas futuros con la puerta del frigorífico
- Limpieza frecuente: No dejes que la suciedad o restos se acumulen en la goma de la puerta. Limpiarla regularmente ayuda a que selle bien.
- Revisa lo que guardas: Asegúrate de que los alimentos y objetos dentro del frigorífico estén bien organizados y no bloqueen la puerta.
- Chequea después de usar: Hazte el hábito de verificar que la puerta esté completamente cerrada cada vez que la uses.
- Inspección profesional: Considera hacer una revisión anual con un técnico para mantener tu frigorífico en óptimas condiciones.
Siguiendo estos consejos, tu puerta AEG debería cerrar sin problemas, lo que ayuda a que el electrodoméstico funcione mejor y dure más tiempo. Y si aún notas que algo no va bien, no dudes en pedir ayuda profesional para solucionarlo cuanto antes.