Cómo ajustar la temperatura en un frigorífico Gorenje

Mantener la temperatura adecuada en tu nevera Gorenje es clave para que tus alimentos se conserven frescos y seguros. Te voy a explicar paso a paso cómo puedes modificar la temperatura tanto del compartimento de la nevera como del congelador.

Conoce los ajustes predeterminados

Cuando enciendes tu frigorífico por primera vez, viene configurado de fábrica con estas temperaturas:

Nevera: 4°C
Congelador: -18°C

Estas cifras son perfectas para el día a día, pero si tienes necesidades especiales, puedes cambiarlas sin problema.

Pasos para cambiar la temperatura

Enciende el aparato: Conecta la nevera a la corriente y espera unas horas para que alcance la temperatura que trae por defecto antes de meter comida.
Elige el compartimento: Para ajustar la temperatura de la nevera, pulsa la tecla
B hasta que se encienda el símbolo
B1. Si quieres cambiar la del congelador, sigue pulsando la tecla
B hasta que aparezca el símbolo
B2.
Modifica la temperatura:
- Para la nevera, con el símbolo
  B1 encendido, pulsa la tecla
  A para subir la temperatura de 1 en 1 grado. Puedes ponerla entre +1°C y +9°C, aunque lo ideal es dejarla en 4°C.

¡Y listo! Así de sencillo es mantener tu Gorenje funcionando a la temperatura perfecta para tus alimentos.

Para el Compartimento del Congelador:

Cuando veas el símbolo B2 iluminado, solo tienes que pulsar la tecla A para ajustar la temperatura. Al igual que en la nevera, cada vez que presiones, la temperatura subirá 1°C. Puedes configurar el congelador entre -16°C y -24°C, aunque lo ideal es dejarlo en -18°C para conservar mejor los alimentos.

Modo en espera: Después de hacer los cambios, la pantalla volverá a mostrar la temperatura del compartimento de la nevera pasados 10 segundos. Si quieres "despertar" el control, solo pulsa cualquier tecla o abre la puerta.

Consejos importantes:

No sobrecargues: Evita llenar demasiado cualquiera de los compartimentos, porque eso dificulta la circulación del aire y puede afectar la capacidad de mantener la temperatura adecuada.
Deja que se enfríe: Tras cambiar la temperatura, el frigorífico puede tardar varias horas en alcanzar el nuevo ajuste, así que mejor no meter comida hasta que esté listo.
Usa las configuraciones recomendadas: Lo mejor es seguir las indicaciones del fabricante para asegurar que los alimentos se mantengan frescos y seguros.

Solución de problemas:

Si notas que el frigorífico no enfría bien, revisa que las puertas cierren bien y que las gomas no estén dañadas.

Asegúrate de que tu electrodoméstico esté bien ubicado y cuente con suficiente ventilación para funcionar correctamente. Si sigues estos consejos, ajustar la temperatura de tu nevera Gorenje será pan comido, y así podrás mantener tus alimentos frescos y en buen estado por más tiempo. ¡No olvides echar un vistazo al manual de usuario para detalles específicos!